"No es una cosecha abundante, pero es una cosecha establey de calidad que estamos sacando adelante", dice Gabriël Viljoen, presidente de la Orange River Producers' Association sobre una cosecha que está cumpliendo sus objetivos: el primero es el mercado prenavideño en Europa, que (como se hizo evidente hace dos meses) sería favorable para las uvas tempranas sudafricanas, pues la temporada en España e Italia terminó antes de tiempo.
En Perú, los volúmenes de uva cultivada en la región de Piura han disminuido debido a la escasez de lluvias en la cuenca amazónica. Además (y es la primera vez que ocurre este año, señala Viljoen), los contenedores de cerezas chilenas con destino a China están restando contenedores a las uvas de mesa peruanas.
"Nosotros [la región de las Provincias del Norte y el río Orange] tenemos aproximadamente 3 millones de cajas de uva en tránsito que llegarán antes de Navidad. La temporada empezó con cuatro o seis días de retraso, así que hay una gran demanda de fruta".
Las condiciones actuales del mercado son positivas para la uva sudafricana y es una gran plataforma de lanzamiento para las tres regiones de uva del Cabo Occidental que empezarán a cosechar en las próximas semanas. Aproximadamente el 75% de la cosecha sudafricana de uva para exportación sigue teniendo como destino Europa.
Adelanto del Año Nuevo chino
La próxima fecha señalada es el Año Nuevo chino, que el año que viene se adelanta al 29 de enero de 2025. Las uvas para esta ocasión pueden envasarse hasta la primera semana de 2025, y hay que hacer una selección exigente para elegir las variedades que mejor se adapten a las especificaciones de alta calidad que demanda el mercado chino.
Las pasas son otro de sus productos estrella y, una vez más, las condiciones meteorológicas en otros lugares (en Turquía, en este caso) se han inclinado a su favor este año y las exportaciones de pasas serán lucrativas durante el próximo año.
"Nuestras condiciones meteorológicas son ideales este año: no esperamos que llueva en un futuro próximo, y las cálidas temperaturas diurnas previstas facilitarán una maduración favorable", afirma Viljoen. "Para evitar trabajar durante las horas más calurosas del día y preservar la calidad de la fruta, las uvas se cortan a partir de las 3 de la madrugada con luz artificial, de modo que los trabajadores puedan resguardarse del sol a las 9".
Cada parcela se corta tres veces a lo largo de una semana: primero los racimos más pequeños, de maduración rápida, luego el grueso de la cosecha y, por último, las últimas uvas en madurar. Cuando la fruta está madura, hay que retirarla y envasarla.
Las uvas se distribuyen a través de varios puertos sudafricanos, como Ciudad del Cabo, Gqeberha (Port Elizabeth) y Durban. Algunos productores también exportan algunos volúmenes a través de Walvis Bay, en Namibia. Hay toda una serie de opciones disponibles para facilitar que las uvas lleguen a diversos mercados en plazos óptimos.
Al final de diez intensas semanas de cosecha, puede parecer que se ha librado una batalla y, este año, los viticultores de Orange River esperan una victoria.
Para más información:
Gabriël Viljoen
Orange River Producers' Association (ORPA)
Tel.: +27 82 373 4769
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