La demanda de tomates no puede satisfacerse con la producción propia de Alemania. En 2012, según datos provisionales, se cultivaron tomates en 315 hectáreas en invernaderos (2011: 321 hectáreas). La cantidad cosechada ascendió a unas 61.200 toneladas en 2012. Para satisfacer la demanda local Alemania importó en torno a 637.000 toneladas de tomates desde países de la UE. Los principales países de importación fueron los Países Bajos con más de 354.300 toneladas, España con casi 163.500 toneladas, Bélgica con unas 58.600 toneladas e Italia con casi 29.400 toneladas. La importación desde países no pertenecientes a la UE alcanzó un total de 45.700 toneladas. De estos países, Marruecos es el principal país de importación con alrededor de 36.000 toneladas.