Los investigadores tienen planeado unos experimentos con sistemas de producción en un par de ubicaciones para estudiar las necesidades de riego y fertilización de los cítricos, pero también tienen previsto realizar unas pruebas de campo con portainjertos de cítricos que han mostrado una tolerancia prometedora a la bacteria de la virescencia de los cítricos.
Se calcula que la virescencia de los cítricos le ha costado a la economía de Florida unos 4.540 millones de dólares en pérdida de ingresos y 8257 puestos de trabajo desde 2006 por la reducción de la producción de zumo de naranja, según muestran los estudios del IFAS de la Universidad de Florida. Detectada por primera vez en Florida, la virescencia provoca que los cítricos caigan de los árboles de forma prematura y, en ocasiones, la muerte de estos.
Otra de las parcelas donadas acogerá un estudio de termoterapia en el que los científicos tratarán a los árboles de cítricos con altas temperaturas para tratar de librarlos de la virescencia.
A principios de este verano, Hughes, cuyo padre y abuelo cultivaron cítricos en el condado de Polk, dice que los productores siempre se han enfrentado a adversidades como heladas y otras enfermedades, como el cancro bacteriano de los cítricos. En ocasiones, según cuenta, como tras las heladas de 1989, un productor que trabajara duro podría conseguir recuperarse.
“Esta virescencia necesita una solución científica. Trabajar más duro no va a solucionarlo", asegura. "La solución tendrá que venir de los expertos del Departamento de Agricultura y del IFAS. La virescencia es algo muy grave".
Hughes, quien enfermó de leucemia, decidió ceder su considerable finca a la Universidad de Florida, en parte, según explica, porque un profesor y mentor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Florida a menudo le decía que los que habían tenido la suerte de recibir una buena educación debían "devolver el favor", y en parte porque quería garantizar un futuro sólido a la Asociación de Productores Citrícolas de Haines City.
El obsequio de Hughes demostró una impresionante previsión, como señala Jack Payne, vicepresidente sénior de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de Florida. "Jim Hughes era un hombre extremadamente generoso y siempre le estaremos agradecido por el regalo que hizo a la Universidad de Florida y al IFAS", añade Payne.