Tradicionalmente, el condado de Pinghe, en la costa oriental de China, es el corazón de la producción de pamplemusas de China. La mayoría de los árboles que dan frutos se plantaron en los años 80. Un productor de Pinghe estima que el número de árboles de pamplemusa en China ha aumentado un 10% solamente este año. "A partir de 2005, las provincias como Guangxi, Hainan y Hubei comenzaron a invertir en la producción de este producto. Ahora, estos árboles tempranos han llegado a la madurez y han comenzado a dar frutos. Siguen plantándose más árboles y la competencia con las zonas de cultivo tradicionales se ha intensificado".
Los productores y exportadores, ansiosos por conquistar el mercado temprano, comenzaron a cosechar hace dos semanas. Es muy pronto, y los críticos aseguran que las frutas todavía no están maduras del todo.
"Los cítricos tempranos ya se han enviado a Europa. Algunos de nuestros clientes también nos exigen cosechar lo más temprano posible. Para satisfacer su demanda, iniciaremos nuestra primera cosecha la semana que viene. Actualmente, las pamplemusas todavía no están maduras; están solamente al 60 o 70%, por lo que son menos dulces y jugosas. Esperaremos otras dos semanas antes de comenzar a cosechar nuestro cultivo para la exportación. Estas semanas marcarán la diferencia en cuanto a la calidad, el sabor y el calibre de las pamplemusas. Los cargamentos que las otras compañías han enviado a Europa y Rusia cuentan con 10 kilos por bandeja, mientras que, más adelantada la temporada, el peso será de entre 11 y 12 kilos por bandeja".
La piel de una pamplemusa que no está completamente madura es más gruesa; la fruta es menos jugosa y contiene un nivel de azúcar menor.
"Estos envíos tempranos nos preocupan. Su calidad todavía no es lo bastante buena y podría decepcionar a los clientes, lo que supondría un problema para las ventas futuras. Esta tendencia es difícil de corregir porque los productores están muy ansiosos por vender. La semana pasada, visitamos varios de nuestros huertos afiliados para comprobar el uso de pesticidas y los niveles de residuos. Al llegar, nos dimos cuenta de que uno de nuestros productores ya había comenzado a cosechar. Otro exportador había ofrecido a nuestro productor 0,20 € más por bandeja para convencerle de cosechar las frutas ahora".