Países Bajos: Solucionado el problema de los retrasos en la aduana

Los problemas relacionados con las revisiones aduaneras en el puerto de Róterdam están a punto de solucionarse, gracias a un acuerdo al que han llegado las autoridades aduaneras y los tres grupos interesados, GroentenFruit Huis, EVO y FENEX. La solución consiste en un nuevo procedimiento de revisión externa que garantizará la seguridad y la integridad del proceso, y que, actualmente, está en periodo de prueba a modo de piloto. Peter Verbaas está entusiasmado: "Hemos pasado mucho tiempo con EVO y FENEX durante las negociaciones con la aduana, cuya actitud ha sido muy constructiva".

El piloto comenzó el 15 de julio y en él participan tres importadores a los que se les ofreció la oportunidad de realizar sus propias revisiones externas. "Después de dos semanas, todo ha salido bien. Sin embargo, durante la evaluación, hemos descubierto que tres compañías no bastan para conseguir buenos resultados, por lo que ampliaremos la prueba para incluir a más empresas", según Verbaas. "El objetivo del piloto es probar el nuevo procedimiento y, llegado el momento, abrirlo a cualquiera que cumpla los requisitos".

"A comienzos de 2016, la aduana canceló el procedimiento de emergencia de revisiones externas a raíz de los grandes riesgos que conllevaba. Aparte de que algunos importadores utilizaban el procedimiento de emergencia como si fuera el procedimiento estándar, algunos de los contenedores se ocultaban a las revisiones. En junio, varios exportadores informaron a FreshPlaza sobre el retraso de los contenedores, que estaba provocando pérdidas. GroentenFruit Huis y las autoridades aduaneras ya estaban negociando para alcanzar una solución.

"Para nosotros, es importante que se reintroduzca la medida de la revisión externa porque es más rápida y más barata", afirma Verbaas. Tal y como se está probando a modo de piloto, el procedimiento de revisión externa, con sus nuevas regulaciones, sigue siendo un procedimiento de emergencia. "Lo idóneo es que los contenedores vayan por la pista interna, ya que es la forma más segura. La aduana también está tomando medidas para optimizar ese procedimiento, porque, hasta ahora, no ha estado funcionando muy bien". Verbaas espera que las revisiones adicionales que añadirá la aduana a principios de 2017 contribuyan a mejorar el flujo de la pista interna. "Supongo que, cuando aumente la capacidad de revisión, la necesidad de las revisiones externas se reducirá aún más".

"Ofrecemos más seguridad para la aduana con este nuevo procedimiento", continúa Verbaas. Por ejemplo, la aduana debe conocer a todas las partes involucradas de antemano. Los solicitantes deben poseer un permiso de OEA (operador económico autorizado) y proporcionar ciertas garantías. Es más, los transportistas no pueden subcontratar el transporte y están obligados a informar a sus conductores de las regulaciones, algo que no controlaba la regulación antigua. "Necesitamos que las compañías estén al tanto de los riesgos de las revisiones externas", continúa Verbaas. "El protocolo no tiene requisitos de bloqueo que puedan ahuyentar a las compañías, pero tendremos que esperar a ver si todas se adhieren a los acuerdos, lo que hace que la situación sea un poco tensa".

También se habla sobre los retrasos que podrían darse en la revisión interna si se ofrecen demasiados contenedores para la revisión externa, un punto de presión que también se ha debatido. "Ahora, la revisión externa tiene una restricción horaria y solo es posible por la mañana, antes de comenzar el periodo de revisiones con mayor ajetreo", explica Verbaas. "Por eso, quien la solicite por la tarde tendrá que esperar hasta la mañana siguiente para poder ofrecer el contenedor". Aunque no deja de provocar varias horas de retrasos, ofrece más certeza a los importadores. "Habrá tensión cuando los volúmenes comiencen a aumentar, pero parece que va bien. Los retrasos serán más cortos que con la situación antigua, en todo caso".