A finales de octubre, comenzará la campaña siciliana de berenjena cultivada en invernadero, que entrará en producción a mediados de noviembre.
La operadora especializada Nuccia Alboni explica a FreshPlaza: "En la provincia de Ragusa, este año las superficies de los trasplantes de berenjena redonda son estables en comparación con el año pasado. Al mismo tiempo, la extensión de berenjena morada es algo inferior, así como la de berenjena larga".
Según la experta, "las superficies trasplantadas de berenjena rayada se han duplicado, por eso seguramente bajarán las cotizaciones en el mercado este año. El aumento de la producción afecta a casi todo el suroeste de Sicilia, que históricamente es la zona más importante para el cultivo de esta variedad".
Las superficies de berenjena blanca también se han duplicado, gracias a la creciente demanda de productos de nicho, una tendencia que se está extendiendo a toda Italia, mientras que en el extranjero esta variedad todavía está por descubrir.
La berenjena blanca la demandan sobre todo restaurantes gourmet y retailers especializados en frutas y hortalizas en el norte de Italia.
En la actualidad, los precios más altos se registran en Turín y Verona, 1,70 euros el kilo. Por el contrario, el mercado de Vittoria, en la provincia de Ragusa, vende la berenjena morada por 1,10 euros el kilo.
El embalaje es el mismo para todas las variedades: son cajas de cartón de hasta 30 x 50 x 15 cm o 30 x 50 x 11 cm.
La parte mediterránea de la península Ibérica es el principal competidor de los productos italianos. La berenjena no es una excepción, pues España dedica grandes superficies en exclusiva a este producto.
Alboni concluye: "Alemania, Francia, los Países Bajos, Croacia y Eslovenia son los mercados más interesados en nuestro producto, pero están apareciendo otros países, como Rumanía y Bulgaria".