China es un gran productor de cítricos. Gracias a su gran tamaño y a la abundancia de recursos naturales, las plantaciones citrícolas están distribuidas por todo el país, como Hunan, Hubei, Fujian o Guangxi. La campaña de este año ya está en plena producción. La cosecha de mandarinas y naranjas Navel empezó en julio y noviembre, respectivamente, y continuará hasta noviembre y enero.
¿Cómo gestionará el mercado la oferta de este año?
Un representante de una gran empresa productora y retailer de China señala que existen diferencias en el mercado en función de las distintas zonas de producción y variedades. El volumen de producción de naranjas Navel, por ejemplo, ha bajado un 30% con respecto a la campaña anterior a causa de las condiciones meteorológicas extremas. En cambio, el volumen de producción de la pampelmusa Honey ha subido porque la superficie de cultivo se ha incrementado cerca de un 40% con respecto al año pasado.
En cuanto a zonas de producción, en algunas de ellas la cosecha ha disminuido significativamente. Por ejemplo, los agricultores de Shiyan, Hubei, calculan que el volumen total de producción en el condado de Danjiangkou llegará a las 178.000 toneladas, un 7,15% menos que en el mismo periodo del año pasado. Principalmente, se achaca al frío y las heladas de principios de año. La superficie total dedicada a la producción de naranja en Shiyan, por el contrario, ha alcanzado una cifra récord. Al final, el volumen de producción en la prefectura de Yichang, Hubei, y en las zonas de cultivo cercanas de Hunan ha aumentado.
Aunque las naranjas de muchas zonas de producción entran al mercado en grandes cantidades, las operaciones de mercado en general se mantienen estables y no hay fluctuaciones de consideración.