"La nueva temporada es bastante incierta y todavía no es posible hacer un pronóstico racionalmente válido", explica el citricultor siciliano Pietro Russo.
"Debido a múltiples factores como las varias enfermedades que todos conocemos (sobre todo la tristeza de los cítricos), la producción es bastante escasa, en especial la de las variedades Moro, afectadas por un verano con lluvias inusuales y copiosas y por las inundaciones. Las cotizaciones son hasta un 30% más altas que el año pasado".
Ahora, los operadores están a la espera de iniciar las negociaciones con los mayoristas y la GDO, "pero los compradores nacionales e internacionales muestran incertidumbre por lo que consideran unos precios altos".
"Si se concreta un precio por la combinación de la demanda y la oferta, no debería ser incierto, dada la temporada. No puede inclinarse todo siempre a favor de la misma parte".
"Sin embargo, los precios exagerados en un contexto mundial en el que los volúmenes de naranjas están en tránsito hacia Europa están siempre al alza, en especial el del producto del norte de África podría favorecer la importación de productos de fuera de la UE. En cuanto a los limones, se registra una caída de las ventas y de las negociaciones".
"El actual escenario internacional es muy incierto y, aunque los mercados de exportación siguen siendo los tradicionales, no creemos que China pueda ser una salida significativa, ni siquiera con los nuevos sistemas logísticos".
Pietro Russo
"Se están plantando nuevos cultivares de naranja sanguina, pero pasarán unos años hasta que haya disponibles volúmenes significativos, si bien en las próximas campañas tendremos más disponibilidad de naranjas pigmentadas y resistentes".
"El mal tiempo que ha afectado a Sicilia (Catania y Lentini en particular) merece mención especial. El fenómeno ha provocado daños en los negocios que producen naranjas Moro y se han tenido que arrancar muchas plantas. Todo esto ha pasado por la absurda negligencia de las autoridades a cargo de mantener el río y las riberas. No es justo que se haya abandonado a los productores en el pago de las consecuencias".