Los productores españoles de hortalizas de invernadero llevaron sus productos al mercado un poco más temprano este año, lo que provocó una situación de mercado difícil, dada la amplia gama de productos holandeses. "El buen tiempo ha aguantado mucho. Hasta la semana pasada, durante el día se alcanzaban entre 26 y 28 grados y las noches aún eran cálidas", dice Stephan van Marrewijk, quien trabaja en el departamento comercial de la cooperativa almeriense Vicasol desde hace doce años.
"Desde entonces, está empezando a hacer más frío. Esperemos que los precios también suban, ¡porque este mes de octubre está siendo dramático! Hay una gran cantidad de productos solapados este año y se perjudican demasiado entre ellos. Es una pena, porque esta competencia feroz no tiene ganadores. Ahora bien, esta situación se resolverá automáticamente cuando el suministro holandés salga del mercado en las próximas semanas", dice Stephan.
Los productores de Vicasol tienen una superficie de producción total de 1.700 hectáreas. Este año no ha habido cambios importantes en los productos cultivados. "Tenemos un poco más de berenjenas y calabacines, pero eso no tiene efecto en el resto de productos. La superficie de tomate se ha mantenido igual y tenemos un poco más de especialidades. Por ejemplo, nos estamos centrando en pimientos más pequeños y sin semillas y en tomates de diferentes colores", comenta Stephan.
La superficie ecológica ha vuelto a aumentar ligeramente este año, pero no tanto como en los últimos años. "El año pasado, la oferta y la demanda de hortalizas ecológicas no siempre coincidían y había demasiado suministro de algunos productos y muy poco de otros. Este año hemos acordado mejor los volúmenes por adelantado con nuestros clientes. Nuestra superficie total de productos ecológicos asciende actualmente a 162 hectáreas", dice Stephan.
Vicasol exporta hortalizas de invernadero a mercados como Francia, Reino Unido, Alemania y países de Europa del Este. El mercado interno español es un mercado en crecimiento. "La cuota de ventas ha crecido del 9 al 14%. Especialmente en el verano tenemos muchos programas con supermercados españoles y, a raíz de esto, ahora también podemos acordar más programas en invierno, algo ideal para los productos que no son adecuados para la exportación", dice Stephan.
Un desarrollo importante es la demanda de la reducción del plástico por parte de los supermercados. Sin embargo, el cambio no es siempre tan fácil, según el vendedor. "Se habla mucho acerca de este tema, pero también debe ser posible. De hecho, el plástico permite alargar la vida útil de varios productos. Por lo tanto, la ausencia de plástico muchas veces significa que los supermercados tienen que vender sus hortalizas más rápido".
Según Stephan, hay mucho futuro para las cooperativas. "La cooperativa Vicasol ya lleva operativa en el sector desde hace cuarenta años. Por supuesto, tenemos nuestra 'lucha' diaria contra las subastas. La ventaja es que las cooperativas defienden los intereses de sus productores al 100%. Y apenas tenemos gastos generales, con seis personas en el departamento comercial vendiendo cada año unos 250 millones de kilos de hortalizas de invernadero".
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Stephan van Marrewijk
Vicasol
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