Los expertos del sector israelí estiman que alrededor del 10 por ciento de los cultivos frutales del mundo se pudren en los árboles y se desperdician porque no hay suficientes trabajadores para recogerlos. Por eso un productor de manzanas del norte de Israel está probando un sistema robótico de cosecha de frutas de Tevel Aerobotics Technologies, una empresa local fundada por veteranos de los sectores aeroespacial y electrónico de Israel.
La empresa Tevel ha desarrollado una plataforma de conducción autónoma con varios robots unidos que vuelan y arrancan la fruta de los árboles. El análisis basado en la inteligencia artificial de los árboles permite a los robots recoger solo la fruta que está madura. A medida que los robots trabajan, el sistema actualiza la información constantemente a los agricultores a través de una aplicación de teléfono móvil sobre cuántos kilos de fruta se han cosechado, y cuánto tiempo llevará terminar el trabajo.
"Es una solución a la escasez de mano de obra agrícola", explica Yaniv Maor, fundador y director general de Tevel, en Gedera, en el centro de Israel. "Pero la principal ventaja es simplemente que puede hacer el trabajo cuando no hay gente que lo haga".
Los robots voladores son más precisos y trabajan más horas que las personas. También pueden realizar otras tareas, como el raleo y la poda de árboles, lo que reduce el coste de la producción de frutas en alrededor de un 30 por ciento.
La solución de Tevel está todavía en fase de prueba, pero la empresa espera introducirla pronto en un mercado global. Se estima que el sector de la robótica agrícola, con un valor aproximado de 4.600 millones de dólares, crece más de un 30% cada año, ya que los agricultores quieren soluciones para la escasez de mano de obra y los costes de las cosechas. La pandemia de COVID-19, que ha intensificado la escasez de mano de obra, con países cerrando sus fronteras y deteniendo o limitando los visados y permisos de trabajo, ha aumentado aún más el interés por la cosecha robótica. Además, se ha informado de varios brotes de COVID-19 entre trabajadores agrícolas en los Estados Unidos, Europa y otros lugares.
Fuente: timesofisrael.com