Jan Botman es un experto en gestión del agua de los pies a la cabeza. Confía plenamente tanto en sus habilidades como en la tecnología, y esa es la fórmula del éxito detrás del innovador sistema de cultivo desarrollado por Botman Hydroponics.
Los cultivos se han realizado tradicionalmente en el suelo durante siglos, pero el cambio climático, las condiciones meteorológicas extremas y las restricciones cada vez más estrictas en cuanto a las emisiones, la calidad de las aguas subterráneas y los agentes fitosanitarios, han llevado a Jan Botman a explorar una solución alternativa: el cultivo basado en el agua.
Jan Botman: "Llevo sumergido en este tema (en más de un sentido) desde 2007. Hoy en día, podría hablar durante horas sobre el cultivo hidropónico y las posibilidades que ofrece, pero en resumen se reduce a lo siguiente: en lugar de estar rodeadas de tierra, las raíces de las plantas cuelgan en agua enriquecida con nutrientes, reduciendo los problemas con las malas hierbas y el riesgo de enfermedades transmitidas por el suelo, además de ofrecer un producto final limpio. Debido a que se necesita una superficie de cultivo más pequeña, el rendimiento relativo es alto. Por otro lado, se puede cultivar durante todo el año, lo que se traduce en hasta 285 cabezas de lechuga por metro cuadrado por año (20 veces más que el cultivo en tierra). Gracias a una gestión eficaz del agua, se consigue una calidad óptima y una producción constante. Además, a la gente ya no le gusta trabajar en el campo, por lo que esto aumenta tu atractivo como empleador".
La hidroponía
Las plantas se desarrollan en una balsa de plástico flotante hecha de plástico 100% apto para alimentos. "La balsa flotante de Botman no tiene ningún efecto aislante; deja pasar la temperatura. Contrariamente a lo que algunos piensan, esa característica ofrece grandes ventajas. La capa de agua debajo de la balsa flotante actúa como una especie de sistema de calefacción/refrigeración bajo el suelo que permite crear un microclima en lugar de tener que calentar o enfriar todo el espacio. Por lo tanto, es un aspecto que lo convierte en una solución extremadamente sostenible, además de ser un sistema cerrado. En lugar de tener una constante entrada y salida de agua, recirculamos el agua existente, que siempre tiene la calidad óptima", explica Jan.
Calidad del agua
"La balsa es importante, por supuesto, pero en última instancia se trata de la calidad del agua", continúa Jan. "Es una combinación de múltiples factores, nada debe dejarse al azar. La investigación y la experiencia han demostrado que una buena ventilación y flujo de la solución de nutrientes son esenciales para la absorción de nutrientes por parte del cultivo". Para aprender más sobre el agua, Jan visitó numerosas empresas, incluyendo varias instalaciones de purificación de agua. "Quería ver por mí mismo lo que pasaba exactamente. El agua sucia se transforma en agua limpia usando microbios que tienen un efecto purificador. Apliqué ese conocimiento a los métodos de cultivo hidropónico y finalmente encontré un sistema completamente nuevo, el FlowAerator". El FlowAerator crea una buena corriente en toda la balsa. Mantiene el agua ventilada y suministra a las raíces de las plantas el oxígeno vital. "Gracias al FlowAerator, podemos mover y ventilar grandes volúmenes de agua en la balsa sin utilizar las técnicas de bombeo convencionales. Es un proceso continuo que minimiza el estrés del cultivo, que tiene como resultado un desarrollo fuerte y sano de la planta".
Después de un largo proceso de desarrollo, pruebas y ajustes, el concepto está completamente listo para su uso, y varias empresas ya están trabajando con dicho método de cultivo. El primer cultivo que se produce de esta manera a gran escala comercial es la lechuga. Los productores de todo el mundo se están interesando mucho por el progreso y los resultados. "La gente a veces olvida que el agua es en realidad la parte más importante del sistema. Todo se reduce a la gestión eficaz del agua. Tenemos que conseguir que más gente sea consciente de ello, por lo que estamos trabajando en demostraciones para poder enseñar cómo funciona el sistema en la práctica. Además, seguimos centrándonos en la hidroponía para las flores. En definitiva, es cuestión de ser paciente, algo necesario a la hora de cambiar el pensamiento y los enfoques convencionales. Pero estamos haciendo un buen progreso ahora que cada vez más gente está viendo los resultados. Al fin y al cabo, el agua es la fuente de toda la vida. Siempre lo ha sido y siempre lo será".
Botman y el proyecto EFRO Greenport Noord-Holland Noord
Como parte del proyecto EFRO Greenport Noord-Holland Noord, Jan Botman y su hijo Jasper están trabajando con investigadores del centro de investigación hortícola Proeftuin Zwaagdijk y con estudiantes del Living Lab del Clusius College’s. Esta asociación de colaboración es mutuamente beneficiosa; los lugares ofrecen una serie de instalaciones, mientras que todos los socios contribuyen con valiosos conocimientos, comparten sus contactos y ayudan a ampliar la red. Se ha puesto en marcha un sistema hidropónico para la producción de lechuga con los socios Be Four Agro y la empresa de fabricación de alimentos Koninklijke Vezet.
Para más información:
Botman Hydroponics
Tel.: +31 63 890 0656
E-mail: [email protected]
www.botmanhydroponics.eu