Las autoridades aduaneras de Alemania han procedido a la retirada del mercado de naranjas procedentes de España, ya que contenían una excesiva presencia de residuos de pesticidas, según notificó el 5 de febrero el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rapid Alert System for Food and Feed, RASFF).
Los análisis realizados por las autoridades alemanas detectaron en las naranjas españolas una concentración de metil clorpirifos de 0,35 mg/kg.
El clorpirifos es un insecticida organofosforado de amplio espectro, cuyo uso prohibió la Unión Europea (UE) el 6 de diciembre de 2019 debido a su alta peligrosidad.
Este compuesto ha estado en el punto de mira durante muchos años por su potencial toxicidad. De hecho, un grupo de investigadores de las facultades de Farmacia y Bioquímica y de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), junto con científicos de la Universidad Nacional de Comahue (Argentina), ya sugirieron la necesidad de revisar su uso en 2015 al comprobar que la exposición a bajas dosis de clorpirifos era un factor que aumentaba el riesgo de padecer cáncer de mama.
Fuente: hortoinfo.es