"Debido a la disponibilidad de clementinas, esta será una campaña para servir a nuestros clientes más fieles"

La campaña de cítricos españoles está teniendo un inicio lento este año con respecto a las ventas, debido a la gran disponibilidad de fruta de ultramar en los mercados europeos. La situación podría dar un giro importante a partir de noviembre, debido al hueco que se prevé en la producción de Clemenules. En las mismas fechas, empezará a notarse también la presencia de las primeras naranjas españolas.

“En estos momentos estamos trabajando con clementinas Oronules, cuyos volúmenes son los habituales en esta variedad, al igual que en otras variedades tempranas”, cuenta Alfons Royo, gerente de la empresa productora y comercializadora de cítricos Royo Fruits, ubicada en Alcanar, al sur de Tarragona.

“La verdad es que el mercado está tranquilo, de momento. No se ve mucha prisa por empezar, por parte de las cadenas de supermercado europeas”, manifiesta el exportador. Y es que, este año se han dado diversas dificultades logísticas que han hecho que se retrasen las llegadas de producto de Sudáfrica a Europa, además de los problemas sociales en el país africano. “Este año se han solapado con nuestro inicio de campaña unas dos semanas más de lo habitual. Pero además de la coyuntura de esta año, parece que Sudáfrica extiende cada vez más su campaña de mandarinas tardías como Orri y Murcott, gracias a su buena vida comercial. No obstante, parece que en estos momentos empiezan ya a limpiarse los mercados de mercancía de ultramar”.

La situación podría cambiar bastante a partir de noviembre, ya que la producción nacional de Clemenules, la variedad más plantada en España y que supone el grueso en los volúmenes desde noviembre a finales de diciembre, caerá estrepitosamente este año debido a la influencia de la plaga del Cotonet de Sudáfrica y las adversidades meteorológicas.

“Empezaremos con las primeras Clemenules en alrededor de 2 semanas. Nuestras plantaciones se ubican entre el sur de Tarragona y el norte de Castellón, donde no hay muchos problemas por Cotonet, como sí los hay más al centro y sur de Castellón. No obstante, las lluvias y el pedrisco harán que alrededor del 40-50% de la producción de Clemenules se pierda este año. Al menos, en general, los calibres serán muy buenos debido a la menor carga en los árboles”, explica el productor y comercializador. “También es probable que baje ligeramente la producción de variedades tardías, pero todavía no sabemos en qué porcentaje”.

De acuerdo con el gerente de Royo Fruits, “este será un año tranquilo en clementinas, una campaña para servir a nuestros clientes más fieles debido a la disponibilidad de fruta. No tendremos prisa, pero tampoco presión de venta. Al no haber variedades alternativas a la Clemenules en el mismo periodo, habrá mayores costes fijos, que han subido significativamente este año, desde el precio de los materiales de envasado al disparatado precio de la energía y el combustible. En definitiva, la fruta nos cuesta entre 6 y 8 céntimos más este año, un problema grande en un año con poca fruta”.

Respecto a las naranjas, las primeras Navelinas españolas empezaron a cosecharse la semana pasada, con unas previsiones de cosecha similares a las del año pasado. “Las ventas y operaciones comerciales de naranja española están todavía más paradas que las de clementinas, pero parece que a partir de la semana que viene empezará a descender la disponibilidad de naranja sudafricana y a notarse la presencia de Navelinas españolas”, indica Alfons Royo.