Los diseñadores de manos y pinzas robóticas tienen un enemigo común: el tomate antiguo. Las pinzas robóticas que se han presentado pueden sostener un huevo o un balón de baloncesto, pero es improbable que una misma pinza pueda hacer ambas cosas. Esto significa que los productos que quedan en el medio todavía son un reto clave.
Wilson Ruotolo, graduado en el Laboratorio de Biomimética y Manipulación Diestra en la Universidad de Stanford, explica: "Lo que queríamos era abordar cómo crear manipuladores que fueran a la vez hábiles y fuertes".
El resultado es farmHand, una mano robótica desarrollada por los ingenieros Ruotolo y Dane Brouwer, graduado en el mismo laboratorio, que se detalla en el trabajo publicado en Science Robotics. En las pruebas, los investigadores demostraron que farmHand es capaz de manipular una amplia gama de productos, como huevos crudos, racimos de uvas, platos, jarras de líquido, balones de baloncesto e incluso una radial.
Los dedos de FarmHand están recubiertos con unos adhesivos inspirados en el geco. Este material adherente pero no pegajoso se basa en la estructura de los dedos del geco y ha sido desarrollado en la última década por el Laboratorio de Biomimética y Manipulación Diestra, dirigido por Mark Cutkosky, profesor Fletcher Jones en la Facultad de Ingeniería, que también es uno de los autores de este estudio.
Fuente: news.stanford.edu