En Sicilia, la cosecha del ajo, que tradicionalmente se siembra en el mes de diciembre, terminó a finales de junio. Dada la vida útil natural del producto, la ventana comercial varía según la demanda: cuanto mayor es la demanda, más corto es el período de ventas. Hablamos con Giovanni Manuguerra, presidente de la cooperativa siciliana RossoNubia.
Giovanni Manuguerra
"Nuestra cooperativa suele concluir la venta entre febrero y marzo. El ajo de nuestros campos es un producto relativamente de nicho, con características organolépticas particulares. El ajo rojo de Nubia toma su nombre de la piel roja de los dientes y del nombre de la localidad donde se cultiva el bulbo desde la antigüedad, sobre suelos predominantemente arcillosos, en un microambiente único y adoptando técnicas ancestrales. Para entender cómo el producto se identifica profundamente con el territorio, es suficiente recordar con qué nombre es conocida nuestra zona en la isla: el País del Ajo", dice Manuguerra.
"En cuanto a la campaña comercial, me gustaría explicar la diferencia entre esta temporada y las anteriores. Si hasta el año pasado los precios estaban en consonancia con los de las campañas anteriores, este año, sinceramente, nos vemos obligados a retocarlos hacia arriba por las subidas sustanciales de combustible, abono, electricidad, etc...", prosigue el presidente.
"Si bien este período es muy difícil para todos, para nosotros estuvo el agravante de las lluvias abundantes en la fase previa a la siembra, el pasado otoño/invierno, que nos impidieron preparar el terreno para la siembra en un manera óptima. Además del aumento de los costes de materiales para la producción, por lo tanto, hemos sufrido otro coste más para intentar recuperar las superficies perdidas. De hecho, hemos sufrido tres golpes: el aumento de los costes generales, la pérdida de kilos debido a la reducción de los calibres por las malas condiciones durante la temporada de crecimiento y la disminución de la superficie plantada en un 30-40%".
"En este contexto general, realmente desalentador, el coste de producción del ajo es de unos 3 euros el kilo, mientras que la venta a los mayoristas se realiza a 3,80-4,00 euros. Los márgenes de beneficio, como se puede comprender fácilmente, son mínimos, si no inexistentes, y más en un año que ve una fuerte reducción de la oferta", concluye el presidente.
Para más información:
Gianni Manuguerra
Cooperativa Agricola RossoNubia
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91027 Paceco - Italia
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