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Refrigeración: un tema candente en el almacenamiento de peras y manzanas

"Los costes energéticos representan una parte mayor de los costes de producción en todas partes", así resume Ann Schenk, del Centro Flamenco de Almacenamiento y Productos Hortícolas (VCBT), la situación con respecto al aumento de los costes del almacenamiento refrigerado de frutas de pepita. El VCBT es una colaboración entre la Asociación de Cooperativas Hortícolas Belgas (VBT) y la Universidad de Lovaina que lleva a cabo investigaciones y desarrolla tecnologías poscosecha.


Ann Schenk y Bert Verlinden, de VCTB

Según Ann y su colega Bert Verlinden, esto se traduce en un aumento de las solicitudes de asesoramiento del VCBT. La cosecha de peras y manzanas en Bélgica estaba en pleno apogeo a finales de agosto, por lo que este tema parece más actual que nunca. Por ahora, Ann y Bert no creen que los altos costes empujen a los productores a abandonar el almacenamiento de frutas de pepita o a vender más fruta directamente de los árboles. "Actualmente no hay mercado para eso, por lo que los productores tienen pocas opciones", apunta Ann.

Cualquiera pensaría que lo lógico sería usar menos energía para frenar los crecientes costes de refrigeración. Esta no es una buena idea, según el VCBT. "Reducir la refrigeración tiene un efecto negativo inmediato en la calidad de la fruta", advierte Bert. Sin embargo, una opción podría ser reducir el tiempo de almacenamiento. "Pero, claro, hay que poder comercializar la fruta. Si toda la fruta sale al mercado a la vez, los precios se desploman, por lo que un almacenamiento más corto solo es posible hasta cierto punto". Sin embargo, los productores necesitan saber qué lotes se pueden almacenar para evitar costes innecesarios. No pueden correr el riesgo de tener, al final del proceso de conservación, fruta con una calidad deficiente.

Modelos de predicción
El VCBT ha desarrollado modelos de predicción, utilizando parámetros específicos, para ver si un lote de manzanas o peras puede ser almacenado. El modelo se basa en cosas como el contenido de almidón y la firmeza de las frutas. Bert señala que algunos de estos lotes son claramente más adecuados para el almacenamiento que otros. "Hacemos algunas mediciones inocuas inmediatamente después de la cosecha y las usamos para hacer una predicción. Podemos decir qué lotes son más o menos adecuados para un almacenamiento prolongado. Almacenar fruta de baja calidad que saldrá en malas condiciones del almacenamiento es como duplicar los gastos porque no se puede vender la fruta y se incurre en gastos de conservación. Esto es algo que debe evitarse absolutamente", añade.

"Si se decide refrigerar, es vital hacerlo inmediatamente después de la cosecha para mantener la calidad de la fruta a largo plazo. Los productores no deberían demorarse en hacerlo para ahorrar energía", añade Ann. El coste es mayor, pero no se puede escatimar en refrigeración, añade. "Deshacerse del calor del campo es el mayor gasto, pero si el producto se va a refrigerar, hay que hacerlo bien. Hay que tomar una decisión. ¿No es mejor enfriar solo la mitad del buen producto y comercializar la otra mitad de inmediato que enfriar mal todo el lote?".

Reducir la respiración
Sin embargo, hay algo que se puede hacer para reducir los costes de energía al refrigerar pomáceas. Por ejemplo, se puede usar etileno como tratamiento poscosecha. El etileno inhibe la maduración de las peras y la manzanas, reduciendo la actividad respiratoria de los frutos entre un 30 y un 40%, explica Ann.

"Reducir la respiración disminuye la producción de calor, lo que disminuye la necesidad de refrigeración". Además, los inhibidores de etileno reducen la producción de CO₂. Cuando las manzanas y las peras se almacenan durante un largo período, el CO₂ se elimina mecánicamente de las cámaras frigoríficas de oxígeno ultrabajo (ULO). "Por lo tanto, cuando se usa un inhibidor de etileno, se necesita menos energía porque hay que eliminar menos CO₂", explica.

Otro desarrollo que tiene un impacto en el consumo de energía es la atmósfera dinámica controlada (ADC). En este caso, almacenar la fruta a bajos niveles de oxígeno también inhibe la actividad respiratoria de los frutos. A diferencia del ULO, el contenido mínimo de oxígeno que la fruta puede tolerar en usando sistemas ADC se determina por lote.

"Un buen lote puede tolerar significativamente menos oxígeno que una sala fría ULO normal", continúa Ann. Cita la Jonagold como ejemplo. En una cámara frigorífica ULO estándar, se mantienen con un 1 por ciento de oxígeno, pero en una cámara frigorífica ADC podrían mantenerse con 0,5 o incluso 0,3% de oxigeno, dependiendo de la calidad del producto. "Hay mucha menos respiración y, por lo tanto, menos producción de calor, lo que significa que se necesita menos refrigeración".

Un tema complicado
Según la empresa holandesa de frutas Masteling, que cultiva y enfría frutas de pepita, la refrigeración en la industria de las pomáceas es tan compleja como apremiante. Cees Masteling señala que los costes de enfriamiento difieren enormemente porque los puntos de partida pueden variar sustancialmente. "Es un tema muy difícil. Algunas empresas todavía tienen contratos de energía de 0,05 €, mientras que otras están pagando 0,20 €. Eso crea incertidumbre y desigualdad en el mercado, lo que lleva a discusiones sobre los precios de venta".

Estas grandes diferencias significan que cada situación debe ser considerada individualmente, dice. El contrato de electricidad de Cees expira en diciembre. "Después de eso, tendremos que pagar más también. No planeamos transmitir ese aumento porque el mercado dicta las ventas, y tenemos clientes regulares a los que debemos servir", comenta Cees. Sin embargo, añade que están tratando de tener en cuenta el aumento de los costes en el precio, pero que no ha sido fácil.

No hay un aumento de ventas directas en el campo, pero los almacenes frigoríficos están vacíos
Según Cess, no hay un mayor interés en las ventas directas en el campo, lo que no es una opción obvia con respecto a las manzanas y las peras. "Ese tipo de ventas son duras porque la cosecha en Europa es bastante grande. El comercio, por lo tanto, asume que habrá suficiente fruta disponible más adelante en la temporada y, por lo tanto, no quiere comprar fruta de primera ahora".

Evidentemente, el aumento de los costes de refrigeración tendrá consecuencias. Cees no cree que afecte significativamente al volumen total de la fruta de pepita. Sin embargo, hay algunos almacenes frigoríficos vacíos. "Si con la refrigeración los costes superan las ganancias, hay que pensárselo muy bien", concluye Cees.

Para más información:

Ann Schenk
[email protected] 
Bert Verlinden
[email protected] 

VCTB
www.vctb.be

Fruitbedrijf Masteling
T: +31 (0)527 201 471
[email protected]  
www.fruitbedrijfmasteling.nl 

Fecha de publicación: