El aumento de los costes energéticos, que ha afectado duramente a muchos productores de invernadero, también se está dejando sentir en el mercado del tomate. En países europeos como los Países Bajos, este aumento de los costes de cultivo está mermando los márgenes de beneficio de los productores, a pesar de los altos precios del mercado. Por otro lado, en países con climas más suaves, como Turquía, donde se necesita menos energía para cultivar, esta situación podría considerarse una ventaja. En Italia, el aumento de este tipo de competencia está afectando a los precios en los mercados nacionales. Mientras tanto, en España y Sudáfrica, las condiciones meteorológicas adversas han hecho que se reduzca la producción en algunas zonas. España se ha visto afectada por las altas temperaturas del verano, mientras que Sudáfrica está lidiando actualmente con fuertes lluvias e incluso granizo en algunas regiones productoras del norte. En China y Brasil también se reportan problemas, pero no relacionados con el clima. Las medidas de control contra epidemias en China y los disturbios políticos en Brasil han dificultado que el producto llegue a su destino. Queda por ver cómo evolucionará el mercado a medida que muchas partes del mundo se adentren en el invierno.
España: Campaña irregular debido a la inestabilidad climática
La superficie dedicada al tomate ha crecido en Almería esta temporada, aunque no tanto como el sector esperaba inicialmente. Los productores plantaron más tomate rama, teniendo en cuenta la previsión de que las producciones holandesas de invierno serían bastante más bajas debido a los altos costes energéticos. Por el contrario, la superficie de tomate redondo se ha reducido, ya que Marruecos sigue ganando terreno, y en su lugar se han cultivado otras variedades de especialidad. Las previsiones siguen distando bastante de la realidad, ya que los Países Bajos, Polonia y Hungría han alargado sus campañas y la demanda de tomates españoles sigue siendo baja. Por otro lado, Marruecos dispone ya de una gran oferta. Los exportadores españoles esperan que Países Bajos termine su campaña a principios de 2023, aunque a partir de estas semanas la producción irá ya bajando progresivamente.
El tomate es un producto que suele asegurar estabilidad en materia de producción, pero esta campaña ha sido irregular, de momento, debido a la inestabilidad climática. Las temperaturas han sido demasiado altas durante el verano y el otoño, lo que ha contribuido a que hubiera buenos volúmenes hasta ahora, pero, por desgracia, también ha favorecido la presencia de plagas. Eso sí, en los últimos días ha estado haciendo más frío y eso ralentizará la producción. Por tanto, se espera que los precios suban en las próximas semanas, ya que actualmente se sitúan por debajo de los costes de producción y los márgenes de beneficio son inexistentes.
Países Bajos: Los precios vuelven a subir, pero los altos costes afectan a los beneficios
En los Países Bajos, los precios del tomate habían caído en agosto, pero ahora han vuelto a subir.
La cuestión es hasta qué punto pueden los productores beneficiarse de ello, ya que los costes también están aumentando. La Universidad de Wageningen estima que la facturación de los productores ha aumentado aproximadamente un 5% este año. Los volúmenes que ingresan en el mercado son más reducidos, lo que se traduce en precios más altos. Además de los ingresos por la venta de tomates, algunos cultivadores también han conseguido generar ingresos con la venta de electricidad gracias a sus sistemas de cogeneración.
En cualquier caso, muchos productores han adoptado la rotación de cultivos. Para algunos cultivadores, los invernaderos permanecerán (de nuevo) vacíos más tiempo de lo normal este invierno. Este invierno ha habido una reducción considerable de los cultivos expuestos y con calefacción. Sin embargo, algunos productores están optando por el llamado cultivo de otoño, que les permite cosechar el producto en sus invernaderos durante la época prenavideña con un uso mínimo de calefacción. Los productores también están estudiando cada vez más las posibilidades de trasladar el cultivo a regiones más meridionales, como España o el norte de África.
Otro motivo de preocupación para los productores sigue siendo el virus rugoso del tomate (ToBRFV). Según las últimas cifras oficiales, el virus está presente en 41 empresas. Se está tratando de introducir variedades resistentes y también se buscan vacunas. En este último caso, solo se permite trabajar en ello previa autorización, aunque los fruticultores necesitan soluciones rápido. Hasta que esto suceda, los productores deben implementar estrictas medidas de higiene para tratar de evitar que el virus se extienda, o al menos mantenerlo bajo control. Otra opción es cambiar de cultivo. Varios productores han empezado (también) a cultivar fresas, pepinos o pimientos.
Alemania: Precios hasta un tercio más altos que el año pasado
Un gran número de países están involucrados en las ventas en este momento, aunque los Países Bajos y Bélgica gozan de una posición dominante. Marruecos y Turquía envían principalmente tomates redondos, Italia sobre todo tomates cherry, y Croacia y España sobre todo tomates en rama. En general, la calidad no siempre convence. En algunos lugares se registra una amplia gama de precios para algunas variedades. En general, los precios se sitúan hasta un tercio por encima del nivel del año anterior, dependiendo de la variedad y el origen.
Francia: El desequilibrio entre la oferta y la demanda hace bajar los precios
Los productos disponibles actualmente en el mercado francés proceden sobre todo de Francia, Bélgica y Países Bajos, cuyas temporadas están acabando. La nueva cosecha arranca ya en Francia, Marruecos o España, y también hay algo de oferta de Turquía.
Actualmente, la oferta y la demanda están desequilibradas. Con todos estos orígenes presentes en el mercado, hay un exceso de oferta, mientras que la demanda va a medio gas. La situación en los mercados mayoristas está muy tranquila. El consumo es bajo, pero esto es algo que afecta a todo el sector hortofrutícola. Esta caída del consumo posiblemente se deba a la inflación y a la situación general, que no generan condiciones favorables para el consumo, y dicho desequilibrio está haciendo que caigan los precios.
En cuanto a la calidad, es difícil de calificar, ya que hay de todo en el mercado, desde producción que no se vende lo suficientemente rápido hasta la que está al final de la temporada con categorías menos buenas. También hay quien está empezando la nueva temporada con productos de buena calidad.
La situación podría seguir siendo difícil durante otras 2-3 semanas, pero cabe esperar una recuperación en enero.
Italia: La producción de tomate sigue aumentando, pero también la competencia exterior
El tomate es la hortaliza fresca más importante en la cesta de la compra de las familias italianas. Esto se debe, en parte, a la amplia gama de variedades (redondo, asurcado, cherry, pera, corazón de buey...) y a los diferentes usos (salsa, ensalada, snack...).
Más de 22,8 millones de hogares compraron tomates durante el periodo de 12 meses que concluyó en septiembre de 2022 al menos una vez. El gasto medio por acto de compra ha aumentado, pasando de unos 2,00 euros a más de 2,3 euros (datos del Panel de Consumidores GfK). Este aumento afecta sobre todo al producto convencional. Los tomates ecológicos tienden a mantenerse estables.
Un análisis de Ismea muestra que la producción de tomate se sitúa en torno al millón de toneladas, creciendo ligeramente, incluso a largo plazo (+9,5% en 10 años), mientras que el consumo anual per cápita se sitúa en torno a los 18 kg, registrando también crecimiento, con un +12,9% en una década. El mayor productor es Sicilia, con cerca del 40% de la superficie y 25.000 hectáreas, seguida de lejos por Lacio y Apulia.
Tras una producción estival marcada por una gran escasez de producto, el sector del tomate de mesa siciliano está ingresando en los mercados de media Europa con una excelente producción invernal, tanto en términos de cantidad como de calidad. La campaña alcanzará su punto álgido en un par de semanas.
"La situación de la producción en general ha mejorado porque el ToBRFV está teniendo un impacto mucho menor, gracias, por un lado, a la introducción de variedades tolerantes al virus, y por otro, a la capacidad de los productores de convivir con el problema tras años de dificultades. En 2022, hubo más daños provocados por el calor excesivo, lo que supuso una caída del 50% en los rendimientos", informa un empresario. "El calor prolongado en toda Europa también conllevó un aumento de la presión competitiva de todos los países productores, especialmente por parte de aquellos que pudieron continuar con las cosechas gracias a un tiempo inusualmente suave. Entre estos se encuentran Marruecos y Turquía, cuyas cifras de exportación han crecido exponencialmente en comparación con 2021. Además, estos países están exportando cada vez más sus productos al centro y norte de Europa porque, debido el conflicto en curso, han tenido que reducir el comercio con Rusia. Su presencia masiva en los mercados europeos está marcada por unos precios más bajos que los de Italia (que ha perdido competitividad) gracias a unos costes laborales mucho más bajos. Los precios rondan los 1,30-1,40 euros/kg, lo que los sitúa algo por encima de los costes de producción".
Turquía: Los altos precios de la energía en Europa podrían suponer una ventaja para los tomates turcos
Turquía produjo 185 millones de toneladas de tomates en 2021 y es el tercer país productor más importante, solo por detrás de China e India. La media global del país se sitúa entre 11 y 13 millones de toneladas. Turquía es también el quinto mayor exportador del mundo, con un 7 al 8% de las exportaciones. Sus principales mercados son los países de Europa del Este, Bielorrusia, Ucrania y Rusia, así como Israel y los países de Oriente Medio. Debido a la guerra en curso en Ucrania y Rusia, que ha provocado una reducción del suministro energético a Europa, los precios de la energía han aumentado en Europa, lo cual ha afectado a la producción de invernadero. Por lo tanto, se prevé que haya una gran demanda de tomates de importación. Turquía podría ser uno de los países preferidos para el suministro de tomates. Hay una gran cosecha este año, sobre todo de las variedades Beef, Tori, en rama, cherry (ecológico y convencional) y cóctel, de las que habrá una gran oferta.
Sudáfrica: Precios más altos, pero grandes pérdidas debido a las condiciones meteorológicas
En Sudáfrica ha llovido mucho últimamente, además de caer granizo en algunos lugares, como en la provincia del Noroeste, donde algunos productores de tomate han sufrido grandes pérdidas.
Sin embargo, el pasado martes llegó una gran cantidad de tomates al mercado municipal y los precios bajaron casi un 25% como consecuencia de la mayor oferta. El precio medio se sitúa ahora en 8 R/kg (0,45 euros) para los tomates de clase 1, en alrededor de 6,65 R (0,37 euros) para el tomate en general en Johannesburgo, y en 10,20 R (0,57 euros) en Ciudad del Cabo. En general, los precios del tomate son más altos que el año pasado por estas mismas fechas.
Las próximas vacaciones de verano deberían estimular la demanda de tomate.
China: Los precios suben debido a las nuevas medidas de control contra la epidemia
Se prevé que los precios de las hortalizas sigan subiendo en el este de China. Las actuales medidas de control contra epidemias, aplicadas en todo el país, están dificultando la entrada y salida de camiones de las zonas de producción y los mercados regionales de hortalizas.
Xinjiang, en el noroeste, es otra importante región productora de tomates. Esta semana, los precios de los tomates al por mayor rondan los 4,50 yuanes por kg, o 0,63 dólares por kg.
En Miyun, al norte de Pekín, acaba de empezar la cosecha de tomates frescos de invernadero. Miyun tiene una producción anual de más de 3 millones de jin, o 1,8 millones de kg. En los últimos años, el gobierno local ha invertido en el sector productivo de tomates de Miyun, lo que implica el pago de subvenciones para la construcción de invernaderos y materiales agrícolas. Los precios oscilan entre 20 y 40 yuanes por jin, o 2-5 dólares por 0,6 kg.
Norteamérica: Cae la demanda en el Día de Acción de Gracias, pero los precios siguen siendo altos
A principios de noviembre, los minoristas se aseguraron de tener un buen suministro de tomates en las tiendas, pero la demanda se ralentizó de cara al Día de Acción de Gracias estadounidense. Un productor-expedidor no espera cambios en la situación durante las próximas dos o tres semanas.
Las condiciones meteorológicas en Florida y Baja California han afectado negativamente al suministro de tomates Roma, Beef, Cherry pera y Cherry. Aunque este no es el caso para todas las variedades de tomate, ya que "hay abundancia en el mercado de tomates en rama y de tomates Cherry mixtos", dice el productor-expedidor.
Otro productor-expedidor de Florida afirma que el suministro de tomates en el estado sigue siendo muy escaso. "Las condiciones meteorológicas, sin duda, han afectado a la disponibilidad por un tiempo", indica. "Hemos tenido una buena cantidad de lluvias y ahora el frío está afectando negativamente al tamaño y calidad de la fruta".
Además, prevé que habrá que esperar hasta mediados de diciembre o incluso enero para que las cosas vuelvan a la normalidad. "Habrá un suministro muy escaso de tomate y será muy caro", dice, añadiendo que en México también está haciendo frío y está habiendo escasez de suministros, por lo que muchos tomates enviados desde México están llegando verdes. "En esta época del año, las tarifas de los camiones son muy elevadas y añaden entre 0,50 y 1 dólares por caja al precio que paga el cliente", afirma.
Mientras los tomates Roma, Beef, Grape y Cherry escaseen, es muy probable que los precios sigan siendo elevados. La temporada está finalizando para los invernaderos de la Columbia Británica, pero California y México producen durante todo el año. "Estos mercados registrarán caídas cuando empiece a aumentar la producción en la costa oeste de México a partir de diciembre", añade.
Prevé que la demanda de tomate aumentará un poco en Navidad, antes de fortalecerse en enero. Los consumidores tienden a buscar opciones más saludables en enero, pero "cubrir esa demanda puede suponer un reto, ya que la producción de tomate cae a sus niveles más bajos en los meses de invierno", dice el productor-expedidor.
"La demanda de tomate se ralentizó de cara al Día de Acción de Gracias, pero la cosa debería cambiar pronto, a medida que nos acercamos a las fiestas navideñas, a pesar de que los efectos de la inflación podrían influir en dicha demanda", añade.
Brasil: Los precios han subido en noviembre debido a los disturbios políticos y las temperaturas
La primera semana de noviembre estuvo marcada en Brasil por los disturbios políticos que paralizaron el país tras conocerse los resultados de las elecciones presidenciales, en las que Lula da Silva se impuso por escaso margen a Jair Bolsonaro. Además de provocar malestar en una nación dividida por las protestas –avivadas por una compleja campaña electoral en la que no ha dejado de agitarse el fantasma del fraude por parte del propio Gobierno, finalmente multado con 4 millones de dólares por el Tribunal Superior Electoral–, los bloqueos en las carreteras repercutieron en la economía y en productos tan básicos como el tomate.
De hecho, el flujo de tomates se vio obstaculizado a principios de noviembre y muchos camiones que transportaban el producto acabaron parados en las carreteras. Según Hortifruti/Cepea, en los centros monitorizados por la entidad, el lunes 31 de octubre se informó de que "la entrada de fruta fue muy baja, lo que provocó una importante subida de precios". El martes 1 de noviembre, con el recrudecimiento de los bloqueos, no se registró entrada de tomates y la única central que reportó ventas ese día fue Ceagesp (SP), que informó de la venta de una pequeña cantidad de fruta sobrante del día anterior".
"En vista de estos factores, la semana terminó con precios al alza en todos los mercados mayoristas: en Ceagesp (SP), los tomates se vendieron a 78,33 R$, lo que supone un aumento del 36,58% en comparación con la semana anterior; en Belo Horizonte (MG), los precios se situaron en 86 R$. 57, un 42,24% más; en Río de Janeiro (RJ), los precios alcanzaron los 82,22 R$, un aumento del 24,37% y, en Campinas (SP), los precios se situaron en una media de 100,00 R$, un 23,28% más".
Tras el fin de los bloqueos en las carreteras, el flujo de tomates y las actividades de cosecha fueron volviendo a la normalidad durante la segunda semana de noviembre. "Sin embargo, al contrario de lo que se esperaba, el volumen de fruta ofertado durante esa semana fue considerablemente inferior al de la semana anterior", explican desde Hortifruta/Cepea. "La semana anterior, debido a las altas temperaturas, se había acelerado la maduración de la fruta y se adelantaron las cosechas. Sin embargo, la semana siguiente hizo un tiempo más suave, por lo que se redujo significativamente la cantidad de tomates maduros en los campos, lo que acabó generando escasez del producto en los mercados".
En vista de ello, la semana terminó con precios al alza en la mayoría de los mercados mayoristas: en Ceagesp (SP), los tomates aumentaron un 13,29% en comparación con la semana anterior; en Belo Horizonte (MG), un 9,68%, y en Campinas (SP), los precios subieron un 23,33%.
La tercera semana de noviembre, con la subida de las temperaturas, el proceso de maduración de la fruta volvió a la normalidad y el volumen cosechado aumentó. "Como resultado, los precios empezaron a bajar el jueves 17. Sin embargo, a pesar de las caídas de precio observadas en los últimos días de la semana, la media semanal volvió a subir en todos los Centros monitorizados por Hortifruti/Cepea". En Ceagesp (SP), el producto registró una subida del 14,55% en comparación con la semana anterior; en Campinas (SP), este aumentó un 8,1%; en Belo Horizonte (MG), un 15,15%, y en Río de Janeiro (RJ), los precios registraron un aumento del 28,48%.
La semana que viene: Resumen del mercado global de la granada