Una de las muchas consecuencias de la sequía severa que sufre España y que, afortunadamente, en estos días las lluvias están aliviando es la caída de la cosecha de cereales y de forrajes verdes, que está teniendo un impacto directo en todos los sectores para los cuales la paja es una materia prima; entre ellos el del champiñón.
Y es que la paja es la base imprescindible del sustrato en el que se cultivan los hongos, y su escasez ha generado una subida de los precios que ya está afectando de lleno a la industria del champiñón fresco, y a la que en algunos meses tendrá que enfrentarse la industria transformadora, con unos márgenes menos flexibles y muy castigados desde hace meses por la subida del resto de los costes materiales y energéticos inherentes a su actividad.
“Es más que evidente que estamos viendo esta situación con preocupación e incertidumbre”, comparte Santiago Salinas, director general de Eurochamp. “Las plantas de producción de champiñón que nos surten aquí en La Rioja están paradas porque en verano no producimos, pero si en septiembre los precios siguen como hasta ahora, rozarían lo inviable para la producción de champiñón en conserva”.
“Para imaginar la repercusión que esto tiene en nuestra industria, hay que tener en cuenta que de un paquete de compost de 20 kilos, 8 de ellos son paja. El año pasado el precio era de unos 45-46 euros por tonelada; hoy por hoy se oyen muchos precios, algunos extremos como 150 € la tonelada, pero, en cualquier caso, por encima de los 100 €. Si este incremento lo trasladamos al cultivo de champiñón, supone entre 12 y 15 céntimos más por kilo producido”.
“El mercado del champiñón fresco es nacional, no tiene la competencia directa de otros países, por lo que podrán repercutir esa subida en los precios porque no se van a ver amenazados por otros operadores”, continúa Santiago. “Pero en nuestro caso la comercialización del champiñón en conserva es global”.
“En Europa, somos los terceros mayores productores de champiñón transformado, después de Holanda y Polonia, y la sequía solo nos está afectando a nosotros a nivel local; ni en Holanda ni en Polonia visualizan ninguna falta de paja, sino por el contrario una mejora de los costes porque la energía ha bajado. El mercado ya había demostrado que los precios del año pasado habían tocado techo, por lo que, aunque nosotros también recuperaremos parte de los costes con la contención de los precios de la energía y los envases, no creemos que el mercado pueda soportar la subida que supondrá el mayor coste de la paja”.
"Hoy estamos hablando de precios, pero podríamos hablar directamente de escasez”
Eurochamp es una SAT especialista en champiñón en conserva, la mayor a nivel nacional y una de las empresas más grandes del sector en Europa. Sus socios son cultivadores de champiñón, a su vez asociados en otras SAT que son las plantas de compost, “por lo que controlamos desde la materia prima hasta la comercialización del producto final”.
“Ya el año pasado el sector riojano estuvo en contacto por un problema sanitario en el cultivo, y este nuevo reto nos ha hecho entender que todos tenemos que estar sentados en una mesa y tratar los problemas comunes en La Rioja. Y al igual que otros sectores para los que el efecto de la sequía es más evidente, pedimos también ayudas a las administraciones públicas para el sector del champiñón”.
“Por ahora, estamos solicitando las mismas vías que otro sector primario que depende de la paja como es la ganadería: que se pare el consumo de paja por parte de las incineradoras de biomasa y, en la medida en la que los precios se mantengan a estos niveles, ayudas directas para los cultivadores”.
Por ahora, el consejo sectorial de Cereales de Cooperativas Agro-alimentarias de España ha realizado una primera estimación de la cosecha en 2023 de 9,1 millones de toneladas, lo que supone casi un 49% menos con respecto a la pasada campaña y un 60,6% menos que la media de los últimos 3 años –con caídas que oscilan entre el 57,2% que se espera para el trigo blando y el 90,1% de la avena–, y la bajada en la producción de paja será, inevitablemente, proporcional. “Hoy estamos hablando de precios, pero podríamos hablar directamente de escasez”.
“No se puede hablar de especulación –como sí ha sido el desembalse de los pantanos en La Rioja para producir energía en plena sequía–, el origen de todo esto es la extrema falta de precipitaciones. Y si 2023 preocupa, el año 2024 puede preocupar aún mucho más, porque todos sabemos que empieza la influencia de El Niño y podría intensificarse la sequía”.
“Por eso, todavía tiene mucha más importancia que los operadores nos sentemos con las administraciones y tomemos decisiones. La decisión de este año puede ser la decisión del siguiente”, recuerda Santiago.
Para más información:
Eurochamp
Carretera de Calahorra, km 1,6
26560 Autol (La Rioja) España
Tel.: +34 941 390 078
www.eurochamp.es