En Chile, los campos de vides y cerezos y algunos de arándanos siguen anegados, embarrados e inaccesibles tras las lluvias torrenciales e inundaciones de la semana pasada. Los productores de hortalizas se han visto especialmente perjudicados, mientras que algunos productores lo han perdido todo, según las primeras noticias que llegan de Chile. De acuerdo con Juan Pablo Orozco, agrónomo y productor y exportador en la chilena Frucentro, "estas lluvias caídas en Chile han sido las peores de los últimos 30 años".
El sector hortofrutícola está evaluando todavía el alcance de los daños, y los primeros indicios muestran desperfectos en infraestructuras, mientras que los efectos en las plantas se verán a más largo plazo.
"Muchos ríos han inundado tierras, casas, etc. No recuerdo un invierno con unas lluvias como estas en tan poco tiempo. Algunos de nuestros viticultores han quedado con todo inundado, pero, por suerte, estamos en invierno y los árboles y las vides se encuentran en reposo vegetativo. No será demasiado grave siempre y cuando no se presenten daños como cicatrices o heridas en el tronco de las vides. Tendremos que aplicar algunos tratamientos para evitarlo, pero debería ir bien. Tenemos horticultores que producen patatas, lechugas, etc., para los que la situación es diferente; para estos agricultores, las inundaciones han sido un verdadero desastre".
Las lluvias torrenciales, que dejaron más de 600 mm e inundaciones entre el 22 y el 25 de junio pasados, afectaron al centro-sur de Chile, incluida la capital, Santiago, así como el puerto clave de Valparaíso. Los cítricos, los aguacates y los arándanos están en temporada ahora además de las hortalizas, mientras que las uvas de mesa y las cerezas están en reposo vegetativo en invierno.
Otro gran productor y exportador de arándanos y cerezas, cuyas plantaciones se encuentran en el valle central más afectado de Chile, comenta: "Hemos sufrido inundaciones muy grandes en algunas de nuestras fincas en Chile. Las explotaciones de arándanos están afectadas, mientras que hay grandes problemas con los campos de cerezos, que también están bajo el agua".
Las primeras valoraciones de la Federación de Productores de Fruta de Chile (Fedefruta) muestran que algunos productores lo han perdido todo. Jorge Valenzuela Trebilcock, presidente de la federación, indica que las infraestructuras han sufrido muchos daños a causa de las inundaciones. Esto incluye esenciales sistemas de riego y bombeo que, o bien han sido arrastrados por el agua o han quedado gravemente dañados. Otros equipos como tractores que estaban en los campos también han resultado afectados. Fedefruta publicará más información cuando vayan llegando los resultados de la evaluación. No obstante, afirma que muchos productores todavía no pueden acceder a sus campos por el barro, el alto nivel del agua y, en general, condiciones impracticables. Tendrán que esperar a que el agua se retire y los campos se sequen para poder determinar la gravedad de los daños.
Otros expertos del sector hortofrutícola chileno confirman los daños sufridos por las infraestructuras: "Muchas infraestructuras de riego se han perdido y se está elaborando un catastro en línea. Aunque las plantaciones se han perdido, nuestra impresión es que habrá un mínimo de fruta en la región. Lo más importante es la pérdida de infraestructuras".
Para más información:
Juan Pablo Orozco
Frucentro
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Email: [email protected]
www.frucentro.cl
