"La campaña comenzó con buenas perspectivas debido a las lluvias caídas en mayo, la reducción de cosecha en Murcia y Almería y los precios altos del inicio de campaña. Los precios fijados fueron muy altos, pero algo ficticios durando apenas una semana en la que se vendió alrededor de un 5-8% de la producción", ha explicado José Ángel Serrano, portavoz de la Comisión Sectorial del Melón y la Sandía de Cooperativas Agro-alimentarias y presidente de la Interprofesional del Melón y la Sandía, ambas de Castilla-La Mancha.
Evolución a la baja de los precios
"Tras los primeros días de campaña, esta fue evolucionando con una caída progresiva de precios, situándose muy por debajo de los costes de producción. En lo que respecta a las exportaciones, también experimentaron una bajada debido al descenso de las temperaturas en los principales países europeos exportadores", continúan desde la entidad.
"A falta de conocer las cifras definitivas de la producción, desde la sectorial del melón y la sandía se considera que los bajos precios de este año no responden a la calidad del producto, que ha sido excelente, ni tampoco al problema de la oferta y la demanda ya que la producción sería ligeramente superior a la del año pasado y las altas temperaturas del verano han alentado el consumo de frutas como el melón y la sandía en España y en toda la UE. En este sentido, cabe indicar que la superficie sembrada aumentó levemente con respecto a 2022, con 6.000 hectáreas sembradas de melón y 3.500 hectáreas de sandía".
Llamada a la reflexión para valorar la continuidad del modelo productivo
Ante esta situación, el portavoz de la sectorial del melón y la sandía de Cooperativas Agro-alimentarias Castilla-La Mancha ha hecho una llamada "a la reflexión del sector para valorar la continuidad del modelo productivo, dado que la mayoría de los años el agricultor no obtiene beneficio económico".
Fuente: agroalimentariasclm.coop