En los últimos años se ha financiado un proyecto para la instalación de sensores Sentek en la Toscana (Italia). El proyecto, dirigido por Giovanni Rallo, de la Universidad de Pisa, consistía en comparar los resultados obtenidos entre los campos testigo, es decir, aquellas parcelas gestionadas de forma independiente por el agricultor sin recurrir al asesoramiento en materia de riego, y las denominadas parcelas DSS, con un tipo de gestión basado en las mediciones efectuadas por las sondas Sentek (foto 1). Para ello se instalaron seis sondas, repartidas equitativamente entre las tres variedades consideradas: Carmen, Conferencia y Williams.
Foto 1: sondas Sentek.
A pesar de la dificultad objetiva de comparar los dos métodos de gestión, el ahorro de agua fue inmediatamente evidente debido a la diferente edad de los perales y a la fertilidad del suelo (las parcelas de control, situadas aguas abajo y por tanto mucho más fértiles, dieron lugar a un mayor desarrollo de las plantas). Anteriormente, el riego alcanzaba una profundidad de 90 cm, pero a raíz de la supervisión de Sentek, el riego por goteo se ajustó para alcanzar una profundidad no superior a 40-50 cm (la zona explorada por las raíces) (foto 2). La duración del riego se redujo de 6 a 3 horas, con lo que se redujo a la mitad la cantidad de agua aplicada, manteniendo al mismo tiempo la productividad media.
Foto 2: humedad medida por la sonda cada 10 cm en una capa de suelo de 60 cm.
