El ministerio y la Sociedad Mercantil Estatal de Infraestructuras Agrarias (Seiasa) han rubricado tres convenios de colaboración que supondrán movilizar una inversión público-privada de 745,40 millones de euros en 11 comunidades autónomas, “para impulsar el regadío sostenible, eficiente y moderno, que es pilar fundamental del sistema agroalimentario español, pero también para garantizar el futuro del medio rural”, ha destacado el ministro Planas.
Ha recordado que el ministerio está inmerso en el volumen de inversión en modernización de regadíos "más ambicioso de la historia", con un volumen que superará los 2.344 millones de euros entre 2022 y 2027. En total se modernizará el riego de 700.000 hectáreas de cultivo y beneficiará a unos 20.000 agricultores. Estas inversiones se completan con las proyectadas de obras en alta por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico por valor de 5.000 millones de euros.
El ministro ha recordado la importancia que tiene el regadío en el sistema de producción agraria de España, que en 2022 contaba con una superficie regada de 3.771.000 hectáreas y, pese a ser solo el 23% del total de la tierra cultivada, en ellas se obtiene el 65% del valor total de la producción vegetal. "Gracias a los sistemas de regadíos", ha recalcado Planas, "el valor de la producción agrícola española ha crecido un 60% en lo que va de siglo".
Además de aportar mayor rentabilidad y productividad a la producción de alimentos, el regadío implica también importantes beneficios sociales, puesto que los procesos de producción, transformación y comercialización generan tres veces más puestos de trabajo que los de los cultivos de secano, con lo que favorece la fijación de población en el medio rural y el equilibrio territorial.
El ministro ha enfatizado que el regadío sostenible es "absolutamente imprescindible para afrontar el doble reto de proporcionar alimentos suficientes a una población creciente con menos recursos hídricos naturales como consecuencia del cambio climático". Por ello, la apuesta por la modernización impulsada por el ministerio incluye una mejora en la eficiencia del agua. Las obras proyectadas supondrán un ahorro de al menos el 10% en el volumen de agua que se utiliza actualmente, pero además habrá un mejor aprovechamiento con sistemas de precisión y la incorporación de nuevas tecnologías. El ministro ha recordado que el 56% del riego se realiza ya por el sistema de goteo, más eficiente. Igualmente, está prevista la utilización de aguas no convencionales, como las depuradas y desaladas.
Fuente: mapa.gob.es