Está claro que los residuos plásticos son perjudiciales para nuestro planeta y para la salud humana. Los científicos han encontrado residuos plásticos en casi todo el planeta, los cuales alteran los ecosistemas, contribuyen al cambio climático y amenazan la salud humana. "Pero cómo reducir estos residuos sigue siendo un gran reto, también en el sector hortofrutícola, que utiliza grandes cantidades de envases de plástico", afirma Daphna Nissenbaum, directora general y cofundadora de TIPA.
El reciclaje no suele ser una opción, ya que solo se recicla el 9% del plástico producido en el mundo. Aunque reducir la cantidad de envases utilizados puede ayudar, no siempre es factible, debido a la necesidad de mantener los productos limpios, secos y agrupados para su envío y transporte.
Sin embargo, los envases compostables, incluido el plástico compostable, se están convirtiendo rápidamente en una alternativa adecuada. Fabricado a partir de polímeros compostables que se descomponen cuando se combinan con residuos orgánicos, como restos de comida, el plástico compostable no deja residuos cuando se separa adecuadamente después de su uso. De hecho, en las condiciones adecuadas, este material se convierte en abono agrícola, que puede utilizarse para nutrir campos y jardines.
Al mismo tiempo, el plástico compostable ofrece muchas de las ventajas del plástico convencional, como mantener los productos limpios, seguros y secos. Este tipo de envases resulta cada vez más atractivo en todo el mundo. Una encuesta reciente reveló que la concienciación de los consumidores sobre los envases compostables está creciendo, y un 30% de consumidores en EE. UU. y el Reino Unido dicen preferir este tipo de envases. En conjunto, el mercado mundial de envases compostables crece un 8% al año.
La empresa de envases compostables TIPA Corp. está preparada para satisfacer esta creciente demanda y promover sistemas alimentarios circulares, afirma Nissenbaum. La empresa amplía continuamente la lista de socios y marcas con los que trabaja para ofrecer diferentes soluciones de envasado para frutas y verduras, junto con otras categorías de productos, como alimentos secos, productos de panadería y ropa. Los clientes de TIPA en todo el mundo van desde pequeños productores como Ceres, que gestiona una finca urbana vertical en Australia, hasta Sunrays, productor de uvas que se venden en Estados Unidos.
Jess Holland, director de la finca urbana vertical Microgreen de Ceres, afirma que los envases compostables de TIPA contribuyen a los objetivos generales de sostenibilidad de la empresa. "Los microgreens no solo proporcionan a nuestra comunidad unas verduras frescas de proximidad, sino que también se desarrollan de forma sostenible, ya que utilizan poca agua y espacio". Ahora, con el uso de envases compostables, "se evitará que miles de envases de plástico vayan a parar a los vertederos", afirma.
"Los envases de TIPA pueden producirse en cualquier lugar, en la mayoría de las instalaciones existentes para fabricar plástico tradicional. Este modelo hace que esta solución sea ampliamente accesible para la producción local, lo que a su vez reduce la huella de carbono y los costes de envío de los envases a quienes quieran utilizarlos". Al igual que el plástico tradicional, los envases de plástico compostable pueden personalizarse con logotipos de marcas, información nutricional y otros datos. A medida que crece la demanda de envases compostables, TIPA sigue innovando, creando nuevos productos duraderos y ecológicos, como bolsas con cremallera, cestas y mallas, todos ellos compostables", explica Nissenbaum.
Concluye diciendo que aún queda mucho por hacer para mejorar nuestro planeta, para garantizar que pueda seguir produciendo suficientes alimentos y otros recursos para mantener la vida humana. "El plástico compostable ofrece una forma factible de reducir los residuos plásticos en el sector hortofrutícola, acercándonos al objetivo de un sistema alimentario más sostenible, sano y natural".
Para más información:
Daphna Nissenbaum
TIPA
Email: [email protected]
www.tipa-corp.com