La fusión en 2019 de la firma valenciana Fruserexa y la murciana Frutas Naturales fue el germen de lo que hoy ha llegado a ser Bollo Natural Fruit, a la que se unió este año, como última gran pieza de este conglomerado hortofrutícola –y a golpe de talonario del fondo Fremman Capital, que controla el 76% del grupo– Bollo International Fruits previo pago de 300 millones de euros.
Bollo Natural Fruit comercializa en total 480 millones de kilos de frutas al año; de esta cifra, los cítricos suponen el 80% y el resto es fundamentalmente sandía y melón. La facturación conjunta en 2022 fue de 500 millones de euros, un 64% de los cuales correspondieron a exportación, y este año, según adelanta Antonio Alarcón, consejero delegado de Bollo Fruit Company, todo apunta a un crecimiento de la facturación hasta 550 millones de euros y un ebitda por encima de los 70 millones, con la comercialización de hasta 500 millones de kilos de frutas a través de las 13 plantas de envasado que se reparten entre Sevilla, Murcia, la Comunidad Valenciana, Brasil y Senegal.
“Cuando empezamos queríamos consolidarnos en Europa, pero vimos que era necesario estar no solo cuando es temporada, sino cuando no lo es. Para ello hemos buscado nuevas zonas de suministro como Sudáfrica, Perú, Argentina, Egipto, Brasil o Senegal. Así, cuando en España no hay fruta, mantenemos el mercado”, señala Alarcón.
Con este nuevo camino quieren afianzar clientes y abrir nuevos mercados en China, Estados Unidos, Canadá, Indonesia y Oriente Medio. “Queremos servirles durante todo el año, no esporádicamente y romper la temporalidad”. También han frenado de momento su afán comprador. “Lo importante es crecer orgánicamente y hacerlo a doble dígito. Y, si es posible, completar las necesidades con compras estratégicas para añadir un nuevo producto o mantener la temporalidad. Las compras han sido la mejor base para el crecimiento, pero ya no son prioridad”.
Fuente: elpais.com