En invierno, la empresa de hortalizas de campo abierto holandesa Ursem-Zuurbier se centra en el cultivo de col picuda. Actualmente no hay una demanda excesiva para Navidad, de acuerdo con Niels Zuurbier. "La presión se encuentra en la falta de personal. Nuestros trabajadores polacos y rumanos vuelven a su país para celebrar la Navidad en casa. En estos momentos tenemos una plantilla reducida para realizar la misma cantidad de trabajo".
Niels Zuurbier (segundo desde la derecha) con sus socios.
"Sin embargo, la venta de col picuda no ha ido mal. En Bélgica, debido al mal tiempo, se han perdido bastantes volúmenes de hortalizas, lo cual ha generado más demanda de mercado", dice el agricultor. "Al mismo tiempo, la competencia en el mercado de la col picuda es cada vez mayor. Y es que la superficie cultivada en Alemania aumenta y también se introducen nuevas variedades, que permiten un almacenamiento prolongado en el tiempo".
"La superficie de hortalizas de campo abierto también disminuye cada año, ya que más de un agricultor se jubila o abandona el sector. Por ello, los retailers quieren asegurarse los volúmenes suficientes mediante la firma de acuerdos. Actualmente, el precio de la col picuda es de entre 0,60 y 0,70 €/kg, un precio bastante alto pero necesario para poder afrontar los gastos del almacenamiento de larga duración", dice Niels.
Mientras que la empresa suministra lechugas Iceberg a muchas plantas de corte, la col picuda se vende principalmente a las cadenas de supermercados. "En las ensaladas, la col picuda se puede sustituir fácilmente por el repollo, así que esta col no tiene mucho valor añadido para las plantas de corte".
Para más información:
Niels Zuurbier
Ursem – Zuurbier C.V.
Donkereweg 6a
1704 DV Heerhugowaard (Países Bajos)
Tel.: +31 6 5474 1523
[email protected]