La escalada de precios en el sector de la alimentación se ha convertido en un tema de preocupación general, que afecta especialmente a productos como el aceite, las frutas de temporada, las carnes y los pescados. En este contexto, una anécdota relacionada con los precios exorbitantes ha captado la atención en las redes sociales, protagonizada por Betsa, una influencer de TikTok, tras su experiencia en una frutería local de Barcelona.
En un reciente vídeo, Betsa ha compartido cómo, con la intención de adoptar un estilo de vida más saludable, terminó gastando un dineral en una compra mínima de frutas. La compra incluía media docena de huevos, un mango, otro mango de tipo "chupón" y un paquete de cerezas; el total: 70,16 euros. La sorpresa vino al descubrir que el alto coste se debía principalmente al paquete de cerezas, cuyo precio ascendía a 57 euros.
La influencer ha expresado su incredulidad y descontento ante el precio, comentando que no le extraña la falta de clientela en ese mercado. Tras probar las cerezas y descubrir que su sabor no difería del esperado, Betsa ha llegado a la conclusión de que "mejor seguir comiendo feliz que sano", dada la situación de los precios.
Este incidente ha generado debate sobre los precios en el comercio local y el impacto que esto tiene en el bolsillo de los consumidores.
Fuente: lne.es