El sector del tomate en España se enfrenta a un escenario de vulnerabilidad debido al significativo aumento de las importaciones en la última década, especialmente desde Marruecos, y a los efectos del virus rugoso en las recientes campañas, lo que ha llevado a una reducción de la mano de obra y al cambio de variedades de cultivo. Desde 2014, la adquisición de tomate de terceros países por parte de la Unión Europea (UE) ha experimentado un crecimiento exponencial, mientras que las exportaciones españolas hacia la UE han disminuido un 43%. Marruecos, en particular, ha visto un incremento del 221% en sus exportaciones de tomate hacia la UE, pasando de 18.045 toneladas en 2014 a 57.926 toneladas en 2023, según datos de Aduanas analizados por la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex).
Este aumento de las importaciones marroquíes ha dejado al tomate español en una posición de desventaja, según ha declarado José María Pozancos, presidente de Fepex, quien ha criticado el régimen de precios de entrada en la UE, argumentando que las concesiones hechas a Marruecos en el cálculo del valor estándar de importación han mermado su efectividad. Las repercusiones de esta situación se observan directamente en el empleo y en la elección de variedades por parte de las empresas productoras, que han tenido que adaptarse a un entorno competitivo desfavorable, diversificando la producción hacia variedades más rentables y aumentando la robotización en los procesos de almacenamiento para compensar la reducción de personal.
En Canarias, la presión de las importaciones ha llevado a que actualmente solo queden cinco empresas dedicadas a la exportación de tomate. Gustavo Rodríguez, portavoz de la Federación Provincial de Asociaciones de Exportadores de Productos Hortofrutícolas de Las Palmas de Gran Canaria, ha destacado la dificultad de competir con países que tienen menores costes laborales y requisitos fitosanitarios. Además de Marruecos, Turquía emerge como otro competidor de consideración, habiendo incrementado sus exportaciones de tomate a la UE de 10.511 toneladas en 2013 a 87.571 toneladas en la última campaña, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
Fuente: efeagro.com