Han pasado tres años desde que Frutura hizo su primera adquisición en el sector hortofrutícola. En este corto periodo de tiempo, la compañía ha pasado de ser una start-up con ideas ambiciosas en torno a la sostenibilidad y un proveedor de fruta de calidad durante todo el año a convertirse en una plataforma global de productos hortofrutícolas. David Krause, CEO de la compañía, reflexiona sobre la trayectoria de Frutura hasta la fecha.
En tres años se han realizado cinco adquisiciones y todas ellas se han caracterizado por negarse a crear una organización corporativa exagerada, con los consiguientes gastos generales. "Queremos funcionar como una start-up ágil y ligera a perpetuidad, ya que es imposible hacer pivotar una organización sobrecargada", afirma Krause. La capacidad de pivotar es esencial en 2024, pues la mayoría de los recursos de Frutura se destinan a las empresas que ha adquirido. "Mantenemos el foco en las empresas de Frutura".
"Estoy muy orgulloso de que un grupo de empresas dispares de diferentes geografías se unieran para lograr unas cifras excelentes en 2023 y 2024, dos años igual de sólidos pese a los efectos de los extremos meteorológicos y los problemas geopolíticos en algunos casos". Krause comparte algunos de los aspectos más destacados de las distintas empresas:
- Dayka & Hackett sigue siendo una potencia, aportando capacidad crítica en aguacate.
- Frutura Uruguay se ha reinventado en una empresa fuerte, supervisada por un liderazgo visionario.
- Agrícola Don Ricardo sigue liderando a través de su cultura de impacto a largo plazo y es la primera empresa de la familia Frutura en lograr la certificación B Corp.
- Subsole ha sobrevivido a varias temporadas difíciles de uva de mesa y acaba de terminar una temporada fuerte, demostrando la importancia de Chile como proveedor global.
- La adquisición de Sun Belle fue enorme, ya que las berries eran la última pieza de las Seis Grandes de Frutura: uvas, cítricos, mangos, aguacates, cerezas y, ahora, berries.
Todas las empresas de Frutura colaboran por su cuenta, con poca presión de la "corporación". "Eso viene a demostrar la potencia y la estrategia de Frutura, altamente escalables", afirma Krause. "He ejecutado muchas integraciones a lo largo de mi carrera y esto es algo que me parece muy alentador". La compañía se negó a renunciar a contar con sólidos equipos de gestión en el momento de la adquisición. "Con las personas adecuadas se puede hacer casi cualquier cosa, y nuestro liderazgo global ha sido inteligente, colaborador, innovador y con un compromiso implacable con la mejora continua", declara.
David Krause.
Retos: factores externos
Sin embargo, no todos los detalles podían planificarse con antelación. Hubo retos que superar, en especial las catástrofes naturales y las medidas gubernamentales. Las condiciones meteorológicas en Sudamérica afectaron considerablemente al suministro de muchas materias primas. Además, la incertidumbre derivada de la convulsión política en Chile y Perú, así como las presiones medioambientales en Perú y la constante necesidad de tener en cuenta la gestión de los valiosos recursos hídricos han supuesto un reto. Las cambiantes implicaciones arancelarias y comerciales, las inciertas presiones sobre los precios y los aumentos de costes sin precedentes también han tenido su incidencia en el negocio. No obstante, la compañía cerró 2023 por encima de las previsiones y prevé lo mismo para 2024. "Desde el principio, dije que no nos conformaríamos con asegurarnos de adquirir empresas con una gestión sólida, y esto demuestra lo que se puede conseguir contando con las personas y la estrategia adecuadas", subraya Krause. "Los grandes líderes hacen que capear juntos los inevitables vaivenes que se presentan en el sector hortofrutícola sea soportable y, en ocasiones, incluso divertido".
Antes de incorporarse a Frutura, Krause había participado en varias grandes adquisiciones en Norteamérica. "Sin embargo, no había previsto el baile de adquisiciones que se produce hoy en Latinoamérica", apunta. Antes, cuando dos empresas llegaban a un acuerdo, la ejecución de una adquisición era rápida. "Subestimé el tiempo y los costes que implican las entidades gubernamentales y otras terceras partes a la hora de cerrar los acuerdos, lo que provocó un buen revuelo". Aunque en Frutura no tienen previsto realizar adquisiciones al mismo ritmo en los próximos años, están mejor equipados y cuentan con recursos más eficaces para hacerlo con menos contratiempos.
Mirando al futuro
Después de tres años cargados de adquisiciones, Krause va a dedicar el resto de 2024 y quizá la primera mitad de 2025 a hacer crecer cada empresa y a sacar el máximo partido del poder de la red. "Ha llegado el momento de la optimización, lo que nos coloca en una posición excelente para alcanzar otro hito de crecimiento". Krause confía en que el crecimiento se produzca de forma orgánica, a través de una mayor penetración en el mercado y quizás en nuevas geografías, puesto que algunos clientes en potencia están ansiosos por que Frutura entre en sus mercados. Además, en Asia hay innumerables oportunidades que aprovechar al máximo. "A un año vista, creo que la plataforma Frutura estará bien posicionada para seguir creciendo".
"A medida que la compañía madure, procuraré que no dejemos de ser una firma centrada en el cliente. Dado que nuestra fundación es tan reciente, nos hemos permitido el lujo de crear una empresa completamente moderna, diseñada para mitigar los retos a los que se enfrentan nuestros clientes hoy en día".
¿Más adquisiciones?
El objetivo de Frutura era tener la combinación adecuada de cultivos para poder cumplir su promesa principal de acercarse lo máximo posible a ofrecerle al cliente su fruta preferida los 365 días del año. "Estoy satisfecho con la profundidad y capacidad alcanzadas en nuestros seis cultivos principales", prosigue Krause. "Estar en una situación de ingresos envidiable después de tres años en un contexto agrícola 'hostil' –en el mejor de los casos– demuestra el poder de la plataforma Frutura y también que, como creíamos, poner al cliente en primer lugar siempre es un acierto".
No obstante, si existe la posibilidad de ampliar las zonas geográficas de la compañía de forma inteligente o de añadir capacidad, estarían abiertos a llegar a un buen acuerdo. Sin embargo, están muy comprometidos con la estructura de la plataforma Frutura y la necesidad de alineación es esencial. "No todo encaja, y se necesita disciplina para no estar tan comprometido con una adquisición que no tengas el valor de pasar de largo cuando tu instinto te dice que no. No todas las ideas son buenas y saber cuándo te equivocas, y admitirlo, es fundamental".
Frutura a cinco años vista
"Si hace cinco años me cien que las berries serían una de mis prioridades, no me lo habría creído", reconoce Krause. Por lo tanto, es difícil predecir dónde estará el mercado en 2029, pero es probable que implique nuevos cultivos y variedades importantes, así como un alcance mundial cada vez mayor, y un énfasis ininterrumpido en la calidad, la frescura y el sabor.
Y lo que es más importante, el consumidor quiere cada vez más calidad sin sacrificar la sostenibilidad, desde la producción hasta el envasado. "Creo que se producirá un cambio radical entre los consumidores educados, que querrán conocer la historia de sostenibilidad de la fruta que consumen". En Frutura consideran que se encuentran bien posicionados para estar en el lugar adecuado en el momento adecuado para cuando eso ocurra. "Es algo que ha formado parte de nuestra ética fundacional y será un motor de mercado aún más importante en los próximos años".
Para más información
Alison Holt
Frutura
[email protected]
www.fruturaproduce.com