La crisis en la industria del jugo de naranja está teniendo grandes consecuencias a nivel mundial, en países como Japón. Según NHK World Japan, varios fabricantes japoneses han comenzado a suspender la venta de productos de jugo de naranja. Una de las principales causas de esta situación es la mala cosecha de Brasil, el mayor productor mundial de jugo de naranja, atribuida a unas condiciones meteorológicas adversas.
La debilidad del yen japonés ha agravado el problema, haciendo que los precios del jugo de naranja importado se incrementen en más del 50% el año pasado, según la Asociación Japonesa de Zumos de Frutas. Morinaga Milk Industry y Yakult Honsha son algunas de las empresas que han suspendido o detenido las ventas de jugo de naranja, mientras que Os Food Service ha incrementado los precios de sus jugos.
Ante la escasez de suministros de Brasil, fabricantes como Tomoe Milk, ubicado en Ibaraki, están buscando alternativas en otros países exportadores como Israel, desde donde han incrementado gradualmente sus importaciones. Por otro lado, algunos productores, como Aikobo, situado en Ehime, están considerando proveedores nacionales, aunque se enfrentan al desafío de la baja producción y la preferencia de los agricultores por el cultivo de naranjas de mayor valor destinadas al consumo en fresco.
Los agricultores de Ehime, una de las principales zonas de producción de cítricos de Japón, dicen que no hay mucho que puedan hacer para mejorar la situación. Las naranjas para zumo y las naranjas de mesa son diferentes. Las primeras suelen tener cicatrices o formas extrañas y a los agricultores no les interesa cultivarlas porque su precio es aproximadamente una décima parte del de las naranjas de mesa.
Además, la mejora en la calidad de las naranjas locales desde la liberalización de las importaciones en 1991 hace difícil reemplazar las importaciones de bajo costo con producción nacional.
Fuente: simfruit.cl