Como ya adelantaron algunos operadores antes del fin de la campaña pasada, este año se prevé en Almería un adelanto en la plantación de los ciclos de tomate que evite la bajada de precios que se observó la campaña pasada a partir de enero.
"Una de las ventajas con las que contamos este año son las variedades resistentes al virus rugoso. El año pasado las plantaciones se fueron a últimos de agosto para evitar en la mayor medida posible los problemas de la plaga y del calor, pero al contar con estas variedades testadas, los agricultores están optando por adelantar el cultivo entre 10 y 12 días; aunque hay agricultores que incluso ya han puesto las plantas en sus fincas, casi 20 días antes que la campaña pasada", explica Julián Rodríguez, productor de tomates y socio de CASI.
"Durante toda la campaña pasada hemos analizado el comportamiento y la producción de estas nuevas variedades en una finca de ensayo de la cooperativa, y hemos visto resultados muy positivos. Suelen ser plantas más vigorosas para combatir mejor la enfermedad, pero vienen dando una muy buena cantidad y la misma calidad que las variedades que hemos estado utilizando hasta ahora, e incluso con mayores consistencias".
"Dentro de las enfermedades, el virus rugoso es el que más nos ha preocupado, y esta campaña empezaremos con mucha más tranquilidad", señala. "Como hemos tenido el parón de un par de meses, el campo está muy limpio de otras plagas; puede haber algo de mosca blanca o Tuta o, con las calores y la necesidad de usar más agua podría haber problemas de nematodos, pero frente al virus rugoso, eso son temas que se pueden controlar".
Cabe recordar que por la bajada de las temperaturas a lo largo del otoño y la disminución de las horas de sol, 10 días de diferencia en la plantación no supone el mismo periodo de diferencia en la recolección, "como mínimo, aumentaría a 20 o 25 días", recuerda Julián.
"El año pasado notamos con fuerza ese retraso. Hasta Navidad la campaña fue muy equilibrada en producción y precios, pero desde entonces en adelante no hubo manera de conseguir aumentos en las cotizaciones, lo que ha hecho que en general, para todos los agricultores haya habido un 20% menos de facturación respecto al año anterior".
"Por ahora no sabemos qué hará Marruecos, si adelantará también sus plantaciones o no, o si contará con nuevas variedades resistentes, porque ellos también han tenido problemas con el virus rugoso; aunque sí tenemos constancia de que en el ciclo de cultivo de primavera-verano han estado teniendo muchos problemas con la Tuta y tendrán que controlar la situación este otoño. Pero sea como sea, en Almería arrancamos este año con muy buenas expectativas gracias a que contamos con estas nuevas variedades".