Varias tormentas de granizo azotaron ayer con fuerza a las comarcas del llano de Lleida, donde dañaron cultivos de fruta de hueso, fruta de pepita y almendros. Según informan las organizaciones agrarias, en algunos casos, las pérdidas de cosechas podrían ser totales, aunque se espera una evaluación más precisa. Este episodio se suma a las adversidades causadas por las heladas y las sequías en las últimas campañas, que han supuesto un duro golpe para la producción de fruta dulce y almendra.
El granizo, con diámetros de hasta dos centímetros, impactó diversas localidades desde primeras horas, intensificándose al mediodía con fuertes lluvias y granizo, especialmente en Fraga y Seròs. Las tormentas extendieron sus efectos a otras poblaciones, con diferentes daños en los distintos cultivos. Según Asaja Lleida, hace tres semanas el granizo ya provocó daños entre el 30 y el 100% de 1.410 hectáreas en Ponent. Aunque todavía es pronto para saber a ciencia cierta los efectos del episodio de ayer, las organizaciones agrarias ya hablan de que algunas fincas podrían haber perdido la totalidad de sus cosechas.
La tormenta se ha producido en un momento crítico de la recolección para muchos agricultores. Las campaña de melocotón y nectarina ya está más avanzada, pero la recolección de pera Conferencia y manzanas, incluida la variedad Golden, aún se encuentra en fases iniciales o de maduración. Por ejemplo, se registran daños del 70 al 80% en fincas de nectarina tardía en Aitona. Sin embargo, en el Baix Segre, la situación es menos grave, ya que solo queda un 20% de la producción por cosechar.
Las tormentas provocaron un descenso abrupto de la temperatura de hasta 10 grados en varias comarcas de Lleida y supusieron un episodio particularmente dañino para el sector agrícola de la región.
Fuente: segre.com