Es posible que hayas visto arbolitos cubiertos por unas bolsas de malla a lo largo de las carreteras. Sirven para protegerlos del psílido asiático de los cítricos y, por tanto, de la enfermedad del greening o enverdecimiento de los cítricos. Una nueva investigación de la Universidad de Florida muestra que los árboles que crecen bajo estas cubiertas protectoras individuales siguen creciendo bien unos años después de que los agricultores hayan retirado las mallas.
Normalmente, después de dos o tres años, los agricultores retiran las cubiertas y entonces los árboles quedan expuestos al psílido, que puede transmitir la mortal enfermedad del greening de los cítricos. Pero el citado estudio ha demostrado que la fruta se mantiene sana.
"Hicimos un seguimiento de los árboles durante tres años después de retirar las cubiertas y observamos una clara mejora en el rendimiento y la calidad de la fruta, a pesar de que los árboles se estaban infectando", dice Fernando Alférez, profesor asociado de Ciencias Hortícolas de la UF/IFAS. "Vale la pena mencionar que la calidad de la fruta disminuye con el tiempo después de quitar las cubiertas a medida que los árboles se van infectando, pero sigue siendo superior a la calidad de la fruta de los árboles que no están cubiertos".
En este caso, alta calidad significa una fruta con más grados Brix, una medida de la cantidad de azúcar.
Alférez y sus colegas también descubrieron que los árboles que estuvieron protegidos por las cubiertas produjeron fruta de mejor calidad durante los 30 meses después de su plantación. Como la fruta es de tan alta calidad, los agricultores pueden obtener beneficios económicos a los dos años y medio de plantar los árboles. "Esto no ocurre si los árboles se plantan sin protección", explica.
Esto se debe a dos razones. En primer lugar, es muy improbable que los árboles no protegidos por las mallas puedan producir algún fruto dos años y medio después de su plantación, según Alférez. Y aunque la produzcan, han estado infectados durante más de dos años, por lo que la calidad de la fruta será mala.
En los últimos siete años, unos 1.000 citricultores han utilizado estas cubiertas para evitar que los psílidos ataquen sus árboles, después de que Alférez las probara y proporcionara datos científicos sólidos que demostraban su eficacia. Esos productores representan lo que Alférez llama una parte significativa de los agricultores de cítricos en el suroeste y centro de Florida.
Durante la mayor parte de los últimos 20 años, los productores de cítricos de Florida han estado buscando soluciones a la enfermedad del greening de los cítricos, también conocida como Huanglongbing (HLB). La enfermedad ha dañado gran parte de los cítricos del estado, pero los científicos de la UF/IFAS están probando muchos métodos para mantener el sector vivo y en buen estado. Actualmente, el uso de cubiertas individuales es la mejor manera de proteger los árboles jóvenes de esta enfermedad.
Fuente: blogs.ifas.ufl.edu