Recientemente, se ha presentado en Piura una prometedora variedad de banano conocida como GAL, desarrollada por la empresa israelí Raham Meristem, con resistencia al hongo Fusarium raza 4, un patógeno del suelo que ha afectado gravemente las plantaciones de banano, especialmente en el norte de Perú. Esta variedad, resultado de años de investigación y desarrollo iniciados en 2018, ha demostrado ser eficaz contra este hongo que también ha causado estragos en países como Filipinas, Colombia y Venezuela.
Los primeros ensayos de campo de la variedad GAL resistente se llevaron a cabo en Filipinas, seguidos por plantaciones en La Guajira, Colombia, donde se obtuvieron resultados positivos. Asaf Diner, representante de Raham Meristem, destacó la importancia de esta innovación para la industria bananera. Tras superar las barreras de entrada, las primeras semillas de esta variedad llegaron a Piura el pasado 20 de agosto, siendo inmediatamente sembradas en los invernaderos de Agronegocios Los Ángeles, socio local de Raham Meristem. Se prevé que, después de realizar pruebas de campo, para mediados de 2025 o inicios de 2026, se pueda elegir el mejor clon de GAL resistente para su cultivo en Perú.
El ingeniero José Ferreira, de Agronegocios Los Ángeles, explicó que el proceso para importar las semillas de GAL resistente a Perú tomó casi dos años, gracias a la colaboración de diversas entidades gubernamentales y legisladores. En el Valle del Chira, en Sullana, más de 500 hectáreas de banano están infectadas con Fusarium R4T, lo que representa una reducción del 10% en la producción de banano en el valle de Piura. Ferreira enfatizó la importancia de la paciencia por parte de los agricultores bananeros durante el proceso de adaptación de esta nueva variedad a las condiciones locales.
Además, subrayó la necesidad de implementar medidas de bioseguridad para contener la propagación del Fusarium R4T, incluyendo la exclusión en áreas no afectadas, la erradicación y contención en áreas ya infectadas. La llegada de la variedad GAL resistente representa una luz de esperanza para la industria bananera en Perú, enfrentando uno de sus mayores desafíos fitosanitarios.
Fuente: elregionalpiura.com.pe