Desde Grecia se informa de que han aparecido melocotones, nectarinas, albaricoques y ciruelas deformados en 26.730,2 hectáreas. Esta información ha sido comunicada por 1.778 productores a través de una plataforma electrónica gestionada por la Organización Nacional Interprofesional de Frutas de Hueso (EDOP), según ha confirmado su presidente, Christos Yannakakis. Las regiones afectadas son Florina, Tríkala, Piería, Pela, Emacia, Salónica, Kilkís y Larisa.
Según los datos, de las 5.094 parcelas agrícolas estudiadas, 3.150, con una extensión de 16.500 hectáreas, registraron un índice de deformidad del 100%. Cabe destacar que unas 1.400 de estas parcelas llevan plantadas más de 12 años. Pela es la región más afectada, seguida de Emacia y Larisa, según el número de agricultores que han declarado problemas y la extensión de las tierras afectadas.
Se están realizando análisis científicos para determinar la causa de estas deformaciones. Se están realizando estudios virológicos dirigidos por la profesora Barbara Malioga, de la Universidad Aristóteles de Salónica, cuyos resultados preliminares se esperan en breve. Estos esfuerzos se complementan con investigaciones similares del Instituto Fitopatológico Benaki. Las directrices actuales desaconsejan la recolección de frutos infectados y recomiendan que permanezcan en el campo.
La comunidad agrícola expresa su profunda preocupación por la situación, y Yannakakis subraya la urgente necesidad de identificar la causa para mitigar el impacto en el sector de la fruta de hueso. Se prevé que las inspecciones estatales de las zonas afectadas comiencen en breve. El fenómeno de deformación, observado por primera vez en 2021 en una pequeña parcela de Ampelies, Pela, se ha extendido desde entonces de forma significativa, lo que subraya la necesidad de emprender acciones inmediatas y rigurosas para proteger los medios de subsistencia de los hogares agrícolas.
Fuente: Sofokleous10.gr