La temporada de limones de ultramar se acerca a su fin. Argentina está terminando con sus envíos y solo quedan unas pocas llegadas. Las importaciones de limón de Chile continuarán hasta principios de octubre, mientras que la producción de México ha disminuido debido a las difíciles condiciones de crecimiento. "Esto presenta una ventana favorable para la región del desierto de California", dice José Fu, de Corona College Heights (CCH). Aunque la temporada de limones de California ha comenzado, la cosecha avanza despacio debido a que la fruta presenta poco calibre. "Muchos productores están esperando a que la fruta aumente de tamaño antes de imprimirle ritmo a la cosecha", señala Fu.
Las condiciones meteorológicas han tenido mucho que ver en esta lentitud en el engorde de la fruta, pues en el desierto el calor ha sido intenso y, aunque las temperaturas están empezando a bajar, las fluctuaciones aún no han fomentado un crecimiento consistente de la fruta. "A medida que las temperaturas se estabilicen en niveles más bajos, la fruta aumentará de tamaño", explica Fu. Otros factores que influyen en el calibre son el cuajado de la fruta y las lluvias caídas durante el periodo vegetativo.
Efectos en la cadena de suministro
El lento comienzo está afectando a la cadena de suministro. Si bien el retraso puede ayudar a absorber los volúmenes de importación, algunos comercializadores tienen calendarios estrictos para cuando se abastecen de limones del desierto, trasladándose al Valle Central una vez que termina la temporada del desierto. "En CCH, estamos abiertos a tomar más fruta cuando esté lista para ser cosechada", comparte Fu.
Fu también indica que los problemas de tamaño pueden no extenderse a otras regiones productoras de California. "Todavía no conozco el dimensionamiento de la cosecha en el Valle Central", indica, y señala que el tiempo seguirá desempeñando un papel importante. La temporada de lluvias, que comienza de aquí a octubre y se prolonga hasta marzo o abril, podría provocar aumentos de calibres unos 30 días después de la caída de lluvias copiosas. Aunque hay rumores de que se avecina un invierno más seco, Fu advierte de que es demasiado pronto para saberlo.
Buenas perspectivas para la exportación
Con el final de la temporada de cítricos en el hemisferio sur, California está bien posicionada para la exportación. "Esta ventana de exportación se abre en cuanto haya suficiente oferta y fruta de alta calidad procedente del desierto", afirma Fu. Mercados como Japón, Corea del Sur, Australia y el sudeste asiático serán destinos clave, sobre todo a medida que se reduzcan las importaciones chilenas.
La demanda de fruta grande se está fortaleciendo, mientras que la fruta pequeña está sufriendo la presión de los precios. "Una vez que el mercado absorba los limones de ultramar, los precios se estabilizarán", concluye Fu.
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José Fu
CCH Citrus
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