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"Eutetranychus orientalis"

Un nuevo ácaro en los cítricos sicilianos

A partir de finales de agosto de este año, tras numerosos informes de citricultores de la zona de Piana di Catania –la mayor región citrícola de Italia–, se constató en campo la presencia de una infestación generalizada causada por un ácaro fitófago recién introducido en Italia.

Efectos de la presencia de Eutetranychus orientalis (Klein)

Los análisis morfológicos de laboratorio determinaron que se trataba del ácaro marrón u oriental de los cítricos, Eutetranychus orientalis (Klein), un ácaro tetraníquido originario de Oriente Medio, del que ya se tenía constancia en varios países mediterráneos (España, Grecia, Túnez, Marruecos, Egipto y Turquía), así como en Serbia.

La presencia de la especie, nueva en el territorio italiano, ha sido notificada a los organismos competentes de la región y del ministerio. La especie no está incluida en la lista de cuarentena.

La aparición del fitófago en el territorio italiano se debe probablemente al movimiento o al comercio de material vegetal infestado procedente de países mediterráneos en los que estas poblaciones ya están presentes.

Los cítricos se encuentran entre las principales plantas hospedadoras de E. orientalis. En España, los estudios han demostrado que el ácaro tiene una mayor preferencia por el limón, seguido de la naranja, mientras que es más ocasional en clementinas y mandarinas. No obstante, la especie está registrada en unas 150 plantas hospedadoras, entre las que se encuentran el aguacate, el mango, el melocotón, el ciruelo y el membrillo.

Eutetranychus orientalis difiere morfológicamente de la araña roja común, Tetranychus urticae (vive en el envés de las hojas y produce abundantes telarañas) y especialmente del ácaro rojo de los cítricos Panonychus citri, en la forma y coloración de los huevos, la escasa producción de telarañas y los diferentes caracteres morfológicos de los distintos estadios biológicos.

Las picaduras de alimentación causan daños similares, que se producen en la parte superior de las hojas en forma de decoloraciones puntiformes de color gris plateado. En los casos más graves, sobre todo en caso de ataques severos a plantas que sufren carencias hídricas o nutricionales, puede producirse filoptosis y desecación de las ramas. Sin embargo, en Sicilia no se ha señalado este resultado hasta la fecha, a pesar del tórrido verano que acaba de pasar.

Eutetranychus orientalis (Klein).

En las hojas, E. orientalis se localiza a lo largo del nervio central y de las nervaduras secundarias, donde también pueden observarse las exuvias de los ácaros mutados y los huevos redondos, más bien aplanados. La especie prefiere las zonas exteriores y más soleadas de la copa del árbol. En los frutos inmaduros de naranjo dulce, especialmente en las partes expuestas, la infestación se manifiesta por una ligera decoloración tendente al plateado. Según la experiencia española, el efecto es temporal y, con el envero, la decoloración tiende a desaparecer. El impacto negativo global de la plaga sobre la producción de cítricos se considera generalmente menor, pero condiciones climáticas o microclimáticas ventajosas pueden favorecer las pululaciones.

Los primeros estudios realizados a nivel de distrito muestran que puede propagarse activa y rápidamente, como ocurrió en España hace unos años (en la península ibérica se informó de la presencia del ácaro en 2001), gracias al establecimiento de condiciones locales favorables para su reproducción.

Los métodos de protección aplicados en los países donde la especie está actualmente extendida incluyen el uso de aceite de parafina cuando la presencia del ácaro es abundante. El uso de acaricidas específicos puede ser necesario en los casos en que empiece a producirse una filoptosis importante.

El uso de acaricidas sintéticos cuando las poblaciones no son particularmente abundantes es ineficaz e incluso perjudicial, ya que estas moléculas son nocivas para los numerosos enemigos naturales que normalmente se las arreglan para contener las poblaciones de ácaros dentro de límites aceptables.

Entre los antagonistas naturales se encuentran los trips del género Scolothrips spp., el escarabajo coccinélido Stethorus punctillum y numerosas especies de ácaros fitoseidos depredadores presentes de forma natural en todas las plantaciones de cítricos, como Amblyseius andersoni, Euseius stipulutus, Iphiseius degenerans, Neoseiulus barkeri, N. californicus, Phytoseiulus persimilis y Typhlodromus spp.

El estudio fue realizado por Giuseppe Massimino Cocuzza, Giovanna Tropea Garzia (Departamento de Agricultura y Alimentación, Universidad de Catania); Riccardo Tumminelli (Observatorio de Enfermedades de las Plantas, Servicio Fitosanitario, Departamento de Agricultura, Departamento de Agricultura, Desarrollo Rural y Pesca Mediterránea, Región de Sicilia, Acireale).