"Ya no tenemos lagunas en el suministro. Disponemos de doble cultivo en casi todas partes, así que de ocurrir algo en un país, siempre tenemos alternativas", comenta Fred Douven, director general de la firma holandesa abbGrowers, sobre los arándanos que la empresa cultiva y comercializa. "Es algo necesario hoy en día, dado todo lo que está pasando en el mundo, incluidas cuestiones climáticas. Es demasiado arriesgado poner todos los huevos en la misma cesta".
Con unas ventas anuales de unos 10 millones de kilos de arándanos, esta empresa holandesa trabaja con productores de Sudamérica, África y Europa, y ha potenciado su política de distribución de riesgos con proyectos en Tanzania, Turquía y la India. Fred cree que Turquía ofrece mucho potencial como zona de cultivo para el mercado de Europa occidental. "El país tiene agua, climas diversos y mano de obra suficiente", señala.
Calidad gracias a la selección y clasificación de variedades
Cultivar en distintos lugares hace necesario usar variedades específicas adaptadas a las condiciones locales. "Tenemos muy en cuenta qué variedades se adaptan mejor a cada región, y nuestro departamento de asesoramiento especializado orienta a los productores en este sentido". Las variedades de club desempeñan un papel cada vez más importante. Por ejemplo, abbGrowers trabaja con el programa de mejora Sekoya y está probando nuevas variedades americanas como Gladiator y Maverick. "Son prometedoras en cuanto a sabor, conservación y textura", explica Fred.
Además de la selección de variedades, la calidad del producto final es otra prioridad para abbGrowers, que recibe el 90% de sus arándanos a granel. "Si la fruta se envasa en el país de origen, nadie comprueba el contenido tras semanas de transporte. Si lo hacemos aquí, garantizamos la calidad". El transporte se realiza en "atmósfera modificada", con envases que protegen el producto de golpes.
Certificaciones y evolución del mercado
Aunque obtener certificaciones es crucial en el sector del arándano, a veces genera fricciones en Sudamérica. Sin embargo, el director general duda de que esto acabe provocando una caída de las exportaciones a Europa. "Los países sudamericanos necesitan el mercado europeo, y el interés por las certificaciones está aumentando también en otros lugares", afirma.
Además, sigue habiendo un gran potencial de crecimiento en el mercado europeo. "En Estados Unidos, se consumen, de media, 3,5 kilos de arándanos per cápita al año; en Europa, todavía hablamos de gramos. El consumo también está aumentando en el este y el sur de Europa, y Fred cree que también hay oportunidades en Oriente Medio y Extremo Oriente. "Solo la India ya tiene 1.800 millones de habitantes; imagina si todos ellos se comieran tan solo un arándano", concluye.
Fred Douven
abbGrowers
Handelstraat 8
5961 PV, Horst (Países Bajos)
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