Por primera vez, los agricultores ucranianos de Volinia han cosechado coles en pleno invierno. Los trabajadores de una empresa agrícola local del distrito de Lutsk, cortaron coles blancas y rojas de los campos, un acontecimiento que nunca formó parte de sus planes originales.
Según el representante de la empresa, el año pasado la siembra de coles en un campo de seis hectáreas se retrasó hasta finales de junio. El calor extremo del verano ralentizó su crecimiento, a pesar del riego de superficie, y en otoño las coles eran demasiado pequeñas para cosecharlas.
En lugar de arar el campo, los agricultores lo dejaron intacto durante el invierno. Afortunadamente, las variedades de col utilizadas eran resistentes al estrés y lo bastante robustas para soportar el frío. "Aumentaron de peso y se pusieron más firmes", explica el agricultor. "Las últimas heladas, de -3 a -5 °C, no les hicieron daño. Por dentro, están en muy buenas condiciones, perfectas para ensaladas".
Se trata de la primera cosecha invernal de coles de la historia de la empresa, y pone de manifiesto el impacto de las temperaturas extremas del verano del año pasado. Según el jefe del departamento agrícola, la combinación de un verano seco y caluroso y unas temperaturas cálidas récord en enero crearon las condiciones para este raro acontecimiento. "Los agricultores se adaptaron y convirtieron esta situación en una ventaja".
Fuente: www.seeds.org.ua