Los problemas de plagas y las tormentas en Andalucía oriental hicieron que se adelantara el final de la campaña del pimiento en algunas zonas. Como consecuencia, las entregas procedentes de España se redujeron notablemente. Según la BLE, esto creó un déficit de oferta que no pudo cubrirse completamente ni siquiera al inicio de la campaña holandesa y belga. Como consecuencia, los precios siguieron subiendo de forma constante, disparándose hasta los 28 euros por caja de 5 kg para el pimiento rojo español en Fráncfort. Tampoco fue raro ver precios superiores a 20 euros por 5 kg en el resto de mercados.
© BLE
Estos altos precios hicieron que creciera el interés en los productos marroquíes, israelíes e italianos, que encontraron compradores a precios más bajos. En cambio, disminuyó el interés por los lotes españoles. Las importaciones turcas se vendieron muy bien, pero también hubo que pagar un poco más. Una vez más, el Ramadán influyó: los envíos turcos siguieron disminuyendo mientras que la demanda aumentó.
Haz clic aquí para consultar el informe completo.
Manzanas
La disponibilidad se hizo algo más escasa a nivel local. En consecuencia, algunos mercados experimentaron subidas de precios, aunque no fueron especialmente pronunciadas. En Fráncfort, los precios subieron algo más para todas las variedades tras la apertura de nuevas cámaras frigoríficas.
Peras
La oferta sudafricana creció, pues además de Williams Christ, también se pudo acceder a Rosemarie, Cheeky y Celina. Las primeros Abate Fetel también llegaron a Berlín en pequeñas cantidades. Los clientes prefirieron quedarse con los productos consolidados de Europa y Turquía.
Uvas de mesa
Mientras que la presencia del producto sudafricano volvió a aumentar, la relevancia de las importaciones de Perú y Namibia se redujo notablemente. Las Thompson Seedless indias seguían estando disponibles en cantidades limitadas y solo en Hamburgo. La demanda fue bastante favorable.
Naranjas
Aunque la oferta disminuyó debido a factores estacionales, la demanda se satisfizo sin problemas. La oferta española siguió llevando la voz cantante, siendo Navelate y Salustiana las principales variedades junto a Lane Late.
Mandarinas
La temporada ha entrado en su recta final: la oferta fue limitada y la calidad empezó a resentirse. Predominaron los productos españoles, complementados por los israelíes, turcos y marroquíes.
Limones
Los Primofiori españoles dominaron claramente el mercado y en algunos lugares tuvieron el monopolio. Los Lame turcos perdieron importancia y en ocasiones desaparecieron del mercado. Las importaciones de Egipto, Italia y Grecia solo tuvieron presencia en casos aislados.
Bananas
El mercado estuvo tranquilo. En general, la oferta se armonizó con la demanda. En Múnich, los clientes tuvieron que rascarse un poco más el bolsillo para los productos de primeras categorías.
Coliflor
Las ofertas italianas predominaron sobre las españolas y francesas. También hubo disponibles algunos envíos belgas, que fueron acogidos favorablemente por los clientes. Los precios subieron sin duda, ya que la calidad convenció.
Lechugas
Las tormentas en las regiones productoras españolas provocaron un suministro limitado de lechuga iceberg. Los precios subieron con frecuencia. Sin embargo, la calidad dejaba mucho que desear en algunos lugares, por lo que hubo que bajar bastante los precios. De Francia e Italia llegaban lechugas de colores.
Pepinos
La temporada centroeuropea se aceleró. Los envíos nacionales se intensificaron notablemente y los holandeses y belgas también cobraron bastante impulso. Por el contrario, la presencia de la, por lo habitual, dominante oferta española se redujo enormemente: en algunos casos, los lotes ya se han retirado del mercado.
Tomates
En general, predominó la oferta española, con un papel importante del producto en rama, así como de los tomates cherry y los redondos. Los Países Bajos e Italia participaron especialmente en la oferta de tomates en rama y tomates cherry. Se disponía de un surtido relativamente amplio, que, sin embargo, no siempre fue suficiente para satisfacer la demanda.
Fuente: BLE