En un aviso publicado el 27 de febrero, la Agencia Francesa de Seguridad Alimentaria (ANSES) alerta sobre el nuevo virus del tomate, ToFBV, y recomienda seguir trabajando para evaluar los riesgos.
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ToFBV, no confundir con ToBRFV
"Las primeras descripciones del virus de la mancha del fruto del tomate (ToFBV), que no debe confundirse con ToBRFV (virus del fruto rugoso marrón del tomate), tuvieron lugar en Italia en 2018 y en Australia en 2019. Más tarde, se notificó su presencia en Brasil, Portugal, España, Eslovenia, Grecia y Suiza. Posteriormente, se detectó en muestras de tomate recogidas en 2012 en Italia y en 2015 en España. Hasta la fecha, no existe ninguna normativa que regule el ToFBV", señala la ANSES.
"La aparición tardía de los síntomas en los frutos hace que no haya forma de anticiparse"
"Los daños observados se limitan al fruto y se caracterizan por una decoloración y una deformación severas que impiden su comercialización. La ausencia de síntomas en las hojas y la aparición tardía de síntomas en los frutos durante el periodo de producción hacen imposible anticipar la aplicación de cualquier medida de gestión (eliminación de las plantas afectadas, control del ácaro vector sospechoso), lo que puede generar un impacto económico importante, como se ha señalado en varios países (Italia y España en particular). Hasta la fecha, dada la reciente caracterización de este virus, no se ha descrito ninguna variedad resistente, y no se ha estudiado la susceptibilidad varietal del tomate", explica la agencia.
Falta de medidas reglamentarias y estatuto frente a este virus
Dada la importancia del sector de la producción de tomate en invernadero en Francia, los daños causados por el ToFBV en su área de distribución actual, el número creciente de informes procedentes de lugares de producción de varios continentes y, más concretamente, de la Unión Europea, y la ausencia de medidas reglamentarias y estatuto con respecto al virus, se ha llevado a cabo una evaluación del riesgo fitosanitario vinculado al ToFBV en Francia continental. El objetivo es evaluar la probabilidad de introducción (entrada y establecimiento) y propagación del virus, evaluar su impacto potencial en Francia e identificar posibles medidas de gestión.
Se realizarán trabajos complementarios para resolver las incertidumbres
Para la agencia, "es necesario realizar trabajos complementarios para resolver las incertidumbres y llegar a una conclusión más firme sobre las prioridades en términos de lucha o limitación de los riesgos de transmisión". No obstante, los resultados del escaneo rápido ya aportan indicios sobre las dificultades de la detección precoz y la ausencia, hasta la fecha, de freno climático al establecimiento del virus, así como sobre el papel sospechoso de un ácaro, A. lycopersici, como vector de transmisión, para el que existen pocos medios eficaces de control, aunque también es fuente de otros impactos en los cultivos de tomate".
Para más información: anses.fr