El cultivo del melón es atacado por la mosca blanca, lo que se traducirá en millonarias pérdidas para este sector productivo de Honduras.
La mayor incidencia se registra en Choluteca y se ha agudizado por la extensa sequía.
Jacobo Paz, secretario de Agricultura y Ganadería, dijo este martes que después de reunirse con productores y exportadores tomaron la decisión de que el Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria (Senasa) adopte una normativa para eliminar los hospederos de manera inmediata al terminar la cosecha 2015-2016.
Agregó que es importante eliminar todos los residuos como melones y hojas contaminadas, que son los que sirven como hospederos para el insecto. Paz dijo que la plaga de la mosca blanca es natural y si hay condiciones se desarrolla fácilmente.
Sostuvo que de tomarse las acciones oportunas, el cultivo de melón estará libre de esa plaga en la siguiente cosecha, la que iniciará en septiembre próximo y finalizará en mayo de 2017.
Impacto
El titular de la SAG dijo que no tiene cifras de la superficie perdida por la mosca blanca, aunque este medio de comunicación conoció que el área afectada puede oscilar entre 300 y 350 manzanas.
La producción por manzana se ubica entre 800 y 850 cajas, la que ha decrecido a partir de 2015 por el extenso verano y que provoca virosis, que es uno de los virus que ataca esta fruta.
Tomando en cuenta esas cifras, las pérdidas pueden oscilar entre 240.000 y 297.500 cajas. Paz dijo que aún restan 10 días para que finalice el segundo ciclo de cosecha.
El funcionario sostiene es importante que se erradique la mosca blanca en melón, ya que algunos países bloquean el acceso de la fruta, entre ellos Japón, que es una de las naciones que ha mostrado interés de importar alguna variedades. El melón es presentado en cajas con un peso que depende del origen de las exportaciones y pueden ser de 10 a 13 kilogramos. Por lo general, se usan cajas con cuatro, cinco, seis o siete unidades.
Fuente: elheraldo.hn