Según los consumidores y los operadores, este año las alcachofas italianas son caras. Los precios elevados asustan a los compradores, debido a la mayor tendencia al ahorro por parte de las familias.
Ermanno Barletta, de Biemme Srl, una empresa de la provincia de Lecce, que suministra frutas y hortalizas a los mercados mayoristas, comenta la actual campaña de alcachofas. "En estos momentos, las cotizaciones al por mayor varían de 0,50 a 0,55 €/pieza para la alcachofas confeccionadas de buena calidad. Al consumidor, hay que añadir unos 0,20-0,25 €/pieza. En campo, el producto se está pagando alrededor de 0,40 €/pieza, en comparación con los 0,20 € del año pasado".
El aumento de precios se debe a las dificultades relacionadas con el mal tiempo que las empresas agrícolas tienen que enfrentar, además del incremento de los costes de producción.
La temporada de alcachofas de Biemme Srl comenzó el pasado 18 de octubre, con un retraso de aproximadamente un mes, debido al tiempo suave del otoño. "La disponibilidad de alcachofas sigue siendo escasa, pero los calibres están mejorando en comparación con el inicio de la temporada", comenta el agricultor. "Por ahora, la temperatura es favorable para el crecimiento, pero nos preocupan los cambios bruscos y repentinos de temperatura, como ya ocurrió en los últimos diez días de noviembre. Registramos una caída en el consumo del 25% en comparación con el año pasado, principalmente debido a los altos precios. Y es que la tendencia inflacionaria cambia el gasto de las familias, que ahora consideran la frutas y las hortalizas como bienes de lujo, no siempre asequibles".
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