Hace casi exactamente un año desde que Nueva Zelanda fue azotada por el ciclón Gabrielle, que llegó justo cuando comenzaba la cosecha de manzanas. Dos de las cuatro principales regiones productoras resultaron afectadas, Hawke's Bay y Gisborne, mientras que Nelson y Otago tuvieron buenas temporadas de cultivo.
"Algunos de nuestros huertos fueron completamente arrasados por grandes trombas de agua, que bajaron por los valles dejando sedimentos tras de sí, y otros quedaron inundados; se vio afectada alrededor del 35% de nuestra producción en Hawke's Bay", recuerda Gareth Edgecombe, CEO de T&G Global. "Un pequeño número de esos huertos nunca los recuperaremos, los restantes tuvimos que restaurarlos eliminando el sedimento y cuidando los árboles hasta su recuperación. En general, la mayoría de nuestros huertos han sobrevivido, lo que honra a los trabajadores. Los rendimientos productivos de la región han vuelto prácticamente a los niveles previos al ciclón, lo cual es alentador, pero aún hay una cantidad ingente de trabajo por hacer para la completa restauración de los huertos".
La temporada de cultivo 2023-24 ha sido buena y la cosecha de las variedades tempranas ha comenzado. Los volúmenes tanto de Envy™ como de Jazz™ crecerán esta temporada, situándose en alrededor de 2,9 millones de cajas y 1,6 millones de cajas respectivamente.
Costes de recuperación
La pérdida de negocio y los costes incurridos han sido un suceso puntual y, según Gareth, de aquí a 2030 la productividad volverá a situarse en el 92-93% del total. "Perderemos algo de productividad, pero no hay nada que podamos hacer para recuperarla, aunque empecemos hoy, tardaremos en recuperarla. Creo que la mayoría de los huertos se encuentran en una situación similar, todos estamos volviendo a ponernos en pie".
Como en la mayoría de las industrias, los productores de manzanas de Nueva Zelanda están viendo aumentar los costes, y también en muchos mercados de exportación los retornos están tardando en subir y no compensan los costes. "Nos estamos enfocando en productos y mercados premium e intentando obtener ganancias de esa manera, y parece que está funcionando bastante bien".
Plantar para satisfacer la demanda
"Hemos estado plantando en todo el mundo para el programa Envy, lo que implica conocer la demanda pronosticada hasta 2030-2035 y luego plasmar eso en un plan de plantación, y eso significa que tenemos que plantar más. Plantaremos más en Europa para los fuertes programas de venta al por menor. También plantaremos más en Washington y Nueva Zelanda para satisfacer esta demanda. El impacto del ciclón en nuestro balance general nos obliga a ser más prudentes en cuanto a la plantación: hemos priorizado el capital para recuperar los huertos de Envy, pero también para nuestra nueva variedad Joli™, que lanzamos el año pasado. Las nuevas plantaciones continúan, pero a un ritmo más lento de lo previsto".
Jazz continúa dando unos resultados extraordinarios en el Reino Unido, mientras que Envy tiende a ser más fuerte en Europa, con consumidores en Italia, España y Francia. Según Gareth, parece que esto guarda relación con una preferencia por manzanas más dulces en los climas mediterráneos y templados. Lo mismo ocurre en Norteamérica; a Canadá le gusta Jazz y a los estadounidenses les gusta Envy. Asia también opta por manzanas más dulces.
La nueva manzana Joli
T&G Global comercializó la nueva variedad Joli en 2023. Venture Fruit, que forma parte del grupo, continuará desarrollando nuevas variedades para el mercado. T&G Global no había lanzado una nueva marca desde Envy, hace ya muchos años.
"Evaluamos unos pocos miles de manzanas al año y Joli dio resultados positivos en las dos características principales: cualidades para el huerto y perfil de sabor. Joli ha tenido resultados tan buenos en estos aspectos que nos pareció que valía la pena poner otra marca a gran escala en el mercado. Si destinamos recursos a algo, queremos llegar hasta el final. Esta manzana tiene un Brix similar a Envy pero un nivel más alto de acidez, lo que la coloca en un punto intermedio entre las manzanas Envy y Jazz. Además, tiene un calibre más grande, por lo que es ideal para compartir".
T&G Global está probando el cultivo de la manzana Joli en varias ubicaciones, pero el movimiento de material vegetal ha sido más difícil durante los años de COVID, por lo que la de Nueva Zelanda será la primera plantación a gran escala, pero también se plantará en Europa y en EE. UU. La magnitud de estas oportunidades de mercado aún está por determinarse.
"Lanzar una nueva manzana es una enorme apuesta, pues, como horticultor, tomas una decisión para los próximos 20-25 años y tienes que hacer una previsión de cómo será el mercado en el transcurso de esos años y cómo se desenvolverá tu producto en un mundo tan competitivo; es una perspectiva bastante desalentadora. Muchos horticultores tantean el terreno produciendo muchas variedades novedosas a la espera de que una o dos despeguen, pero no queremos hacerlo así; hemos sido más cuidadosos y hemos sido prudentes en la investigación para esperar a tener algo que estuviéramos seguros de que, por sus características, fuera a tener éxito a la larga. El tiempo dirá, es una apuesta a largo plazo".
"Creemos que hay varios mercados asiáticos que continuarán creciendo con fuerza durante los próximos 20 años y la categoría de manzanas premium se considera muy importante. En estos mercados, las manzanas premium grandes atraen a los consumidores para ocasiones especiales, para compartir y regalar, lo que hace que nuestras marcas Envy y Joli sean idóneas. Envy está más posicionada como una manzana de lujo para regalar, mientras que Joli será más una manzana para compartir, más convencional".
Dificultades en el envío
Parece que en los últimos años no ha habido ni una sola época en la que no se haya presentado algún problema para el envío de mercancías en todo el mundo; actualmente los exportadores se enfrentan a la crisis en el mar Rojo y la bajada de los trayectos por el canal de Panamá. Para algunos países va a suponer un verdadero reto, mientras que otros no se verán afectados.
"Nueva Zelanda está enviando menos a Europa –que cada vez es más autosuficiente– y está redoblando su apuesta en Asia y EE. UU. Si analizamos las rutas de envío desde Nueva Zelanda, Asia no se ve afectada por la situación en el mar Rojo ni tampoco la costa oeste de EE. UU., así que somos bastante afortunados desde esa perspectiva. Enviar a Europa supondrá bordear África, lo que derivará en tiempos de tránsito más largos y más caros, y, por lo general, más interrupciones de los horarios de envío y de la disponibilidad de equipos. Hemos entablado relación con Kotahi, un proveedor de servicios de transporte marítimo en Nueva Zelanda que puede reunir toda la red de exportación a gran escala. En cuanto a la próxima temporada de exportación, somos cautelosos, pero no estamos preocupados en exceso".
A prueba de futuro
"El envío es algo en lo que se puede trabajar con buenas asociaciones, pero el cambio climático y la inestabilidad de las condiciones meteorológicas es algo que estamos notando cada vez más y tenemos la responsabilidad de adoptar estrategias. También están entrando en vigor varias normativas que cumplir. Estamos trabajando para reducir nuestras emisiones e implantar estrategias de mitigación que reduzcan nuestros riesgos, como protección contra el granizo en nuestros huertos y la ampliación de las regiones de cultivo en Nueva Zelanda y en todo el mundo. Desde un punto de vista de adaptación climática, la Hot Climate Partnership es importante para que podamos continuar desarrollando y comercializando variedades de manzanas y peras tolerantes al calor. Entre otras regiones, estamos valorando Canterbury como nueva región de cultivo en Nueva Zelanda, lo cual resulta muy interesante".
Para más información:
Michaela Scholtens
T&G Global Limited
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tandg.global