España es rica en frutas y hortalizas tradicionales, muy reconocidas y valoradas a nivel regional, pero que difícilmente pueden encontrarse fuera de su temporada nacional. "Una de estas hortalizas es la calabaza", señala David Casanoves, de Yummy Fresh. "En Valencia, por ejemplo, se produce la calabaza Cacahuete, muy conocida en toda la zona y que se aprecia mucho por su calidad interna y su nivel de azúcar; aunque no es la única. También están la calabaza Roteña de la zona de Sevilla o la que en Murcia se conoce como Totanera, que, como curiosidad, es del mismo tipo que la calabaza Marina de Chioggia, de la región italiana de Véneto. Otro ejemplo destacado es la calabaza Carruécano, consumida habitualmente en el País Vasco y que goza de una amplia popularidad en la región".
"Yummy Fresh ya trabajaba en la producción y comercialización de cebolla dulce en contraestación en Perú. En una ocasión, uno de nuestros clientes se puso en contacto con nosotros preguntándonos si podríamos suministrar también la calabaza fuera de la temporada nacional".
"La calabaza suponía una oportunidad para rotar los campos en los que ya hacíamos cebolla en Perú, y además en ese momento el mercado de la calabaza era un mercado cautivo, aún por desarrollar; especialmente el de la contraestación. Teníamos la oportunidad de atender a un mercado vacío de febrero a junio con un producto cuyo consumo estaba en claro auge, así que en 2007 empezamos a producirla".
"Desde entonces, ya llevamos 17 años trabajando en el suministro de calabazas en contraestación, especializándonos en las variedades Muscat, Carruécano, Cacahuete valenciana y Delica".
"Vemos que en los últimos años el mercado ha lanzado bastantes variedades nuevas, la mayoría híbridas, pero que a la vez los supermercados están reduciendo cada vez más el abanico de variedades que venden, convergiendo poco a poco hacia una sola, y en este caso parece ser la Butternut la que se ha impuesto".
"Muchas cadenas van en esa línea de simplificación de producto, pero vemos que hay otros modelos posibles, como en Estados Unidos, donde el surtido de calabazas de un supermercado puede estar compuesto por 4 o 5 tipos diferentes; y, sobre todo, vemos que es una realidad que, dentro de este mercado, existe un público, nada despreciable, que valora y aprecia la calidad de ciertos productos regionales. No es posible simplificarlo todo a una sola referencia a nivel nacional".
En Yummy Fresh, de hecho, proveemos con nuestras calabazas en contraestación a importantes clientes de mercado fresco y de cuarta gama tanto nacionales como internacionales e incluso hay variedades con las que no podemos cubrir la demanda que existe".
Y es que, en los últimos años, el avance del consumo de calabaza, "que ha crecido en paralelo al incremento en el consumo de boniato", señala David, "ha sido excepcional". "En ambos productos los consumos han crecido de manera exponencial, sobre todo, a raíz de la cuarta gama, que es la que ha permitido expandir el consumo a todos los niveles, tanto en el retail como en la industria".
"En los últimos años ha surgido una gran cantidad de formatos y productos hechos con calabaza, desde la calabaza asada al horno hasta innovaciones como las láminas para lasaña de calabaza, por ejemplo; pero sigue siendo un producto al que se le puede sacar más punta, más allá de la típica crema de calabaza, y estamos seguros de que su consumo, a pesar de haber crecido mucho en los últimos años, aún puede seguir aumentando de forma considerable".
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