La temporada de la pitaya llega a su fin lentamente en España con unos resultados muy positivos, sobre todo, para las plantaciones de alto rendimiento, que han hecho que cada vez más productores se animen a cultivar esta fruta.
"Tras años de experiencia en el cultivo de pitaya, en Pitaya del Sol hemos desarrollado un sistema de cultivo de alta eficiencia con el que estamos ayudando a desarrollar plantaciones con alta rentabilidad no solo en España", explica José Ángel Cano. "Somos viveristas especializados en pitaya y en maracuyá pero también productores y, de hecho, esta campaña hemos comercializado 120.000 kilos de pitaya y 40.000 de maracuyá, y queremos aumentar los volúmenes disponibles para poder incrementar las exportaciones de ambas frutas a Europa; principalmente a Países Bajos y Reino Unido".
"En cuanto al cultivo, hemos conseguido aumentar la productividad mediante el uso de sacos con un sustrato específico en el que las plantas se desarrollan. Hay que tener en cuenta que la raíz de la pitaya en muy fina y posee una capacidad de penetración en suelos duros muy baja, por lo que en estos sistemas hidropónicos favorecemos el desarrollo radicular de la pitaya y, por tanto, la producción de fruta", apunta Cano.
"Además", continúa, "este sistema requiere mucha menos agua. La planta de la pitaya en sí es un cactus, por lo que necesita menos agua que las plantas de otras especies, y el cultivo en contenedores hace que el riego sea muy efectivo y que el sustrato no pierda ni una gota del riego que se le aporta. Así, además de optimizar el riego, se evita que aparezcan enfermedades de raíz y se aumenta la rapidez de la entrada en producción".
José Ángel Cano explica que "las variedades autopolinizantes están ayudando también a maximizar la rentabilidad del cultivo, ya que disminuye muchísimo el gasto en mano de obra de las variedades tradicionales, que deben de ser polinizadas a mano. La inversión inicial es más cara, porque los esquejes vienen de Asia y tienen un precio mayor, pero el cultivo tiene menos gastos, y, otro factor importante, las plantas de variedades autopolinizantes comienzan a dar producción un poco antes y acaban un poco después".
"Con solo una hectárea, bajo nuestro sistema, un agricultor libre puede obtener entre 40.000 y 60.000 euros netos"
El cultivo de la pitaya es relativamente joven en España, donde ha tenido una buena aceptación y, de hecho, una expansión más que interesante. "Yo soy manchego y personalmente conocí la pitaya en Brasil a través de mi mujer, que es brasileña", comparte José Ángel. "Yo no era agricultor, pero me fascinó conocer una fruta que se producía tan rápido, que era tan buena para la salud y, además, tan rentable. Así que durante un tiempo estuve conociendo bien los cultivos tanto de pitaya como de maracuyá, visitando a productores en Tailandia, Brasil o México; aprendiendo las diferentes formas de producirlo, qué variedades eran más rentables, etc., y en 2016 nos vinimos a Málaga y pusimos en marcha Pitaya del Sol".
(Foto derecha: plantación de pitayas asesorada por Pitaya del Sol en Latinoamérica).
"Ya hemos desarrollado plantaciones bajo este sistema en Málaga, Córdoba, Sevilla y otros puntos de Andalucía, y también a lo largo del Levante en España. Y gracias al conocimiento en el cultivo y a la investigación continua en la producción de estas dos frutas, también hemos asesorado a productores de Ecuador, México y Brasil, donde además tenemos fincas con agricultores asociados", señala.
Plantación de maracuyá de 7 meses en Murcia.
"La pitaya y el maracuyá cada vez se conocen y se venden más. Nosotros en Pitaya del Sol cultivamos sin ningún tipo de químico consiguiendo unos resultados inmejorables. Tenemos cuatro tiendas en las que vendemos parte de nuestra producción, porque la mayoría va a exportación a Europa, y vemos cómo la demanda no para de aumentar en los mercados europeos y también aquí en España. Y aunque la fruta tenga cada vez un precio más asequible, sigue siendo muy rentable para los agricultores; de hecho, siempre digo que son dos frutas ideales para productores pequeños porque con solo una hectárea, dan para vivir", destaca Cano.
"Al precio al que se paga en origen, teniendo plantaciones eficientes y contando con un buen asesoramiento, en una hectárea de pitaya o maracuyá con 2.000 plantas, un agricultor libre puede obtener entre 40.000 y 60.000 euros netos", detalla el productor.
"Nuestra intención es seguir creciendo en producción", prosigue José Ángel, "aquí, pero también en nuevas zonas. Vemos que en el sur de España tenemos temperaturas cada vez más altas —en Córdoba hemos tenido días de 50 grados a la sombra— y con mayor frecuencia, que afectan a estos cultivos pese a que la pitaya sea un cactus. Por eso, vamos a empezar a hacer pruebas de producción en colaboración con varios agricultores en el norte, concretamente en La Coruña, donde creemos que la pitaya puede cultivarse con éxito".
Para más información:
Pitaya del Sol
Camino del Algarrobal s/n, 29710 Periana, Málaga, España
Tel.: +34 662 526 781 / +34 672 674 692
[email protected]
https://pitayadelsol.com