Como en años anteriores, la segunda mitad de la campaña holandesa de exportación de cebollas empezó con cierta calma. Pero, según Rinus Wisse, de Wiscomex, no hay motivos para ponerse nervioso. "La ventaja es que hasta la semana 52 tuvimos buenas exportaciones. Las tres primeras semanas de este año también han ido bien", afirma.

"Partiendo de una cosecha total de 1,35 millones de toneladas, se debe exportar una media de 20.000 a 22.000 toneladas. A primera vista, parece un poco más de lo que podemos manejar porque, en los años de mayor actividad, exportamos una media de 19.000 toneladas. Pero no son volúmenes alarmantes".
"Ahora las exportaciones van perdiendo algo de ritmo cada semana, así que puede que nos quedemos con algún excedente en las diez últimas semanas de la temporada. Pero confío en que los precios puedan mantenerse más o menos en el nivel actual, de 0,16 a 0,22 euros. En cuanto a la calidad, no estoy nada decepcionado con las cebollas", asegura Rinus.
La celebración de Eid-al-fitr podría reactivar la situación
"Las distintas perspectivas del mercado también parecen buenas. Por ejemplo, se espera que toda Europa del Este entre en el mercado, sobre todo con estos precios. También esperamos a España, y puede haber otro repunte debido a Eid-al-Fitr. La ventaja es que las cebollas holandesas resultan atractivas para muchos países a estos precios. Se puede servir a mercados como Costa de Marfil durante más tiempo que en un año caro".
"Tampoco muchos exportadores han tomado posiciones importantes, y Polonia también sigue aceptando cebollas. Eso significa que hay un límite de mercado. Además, lugares como Austria se están quedando cortos", continúa Rinus. Lo que sí ve es un creciente desequilibrio del mercado, pues las empresas más grandes acaparan cada vez más cuota de mercado. Eso significa que la segunda mitad de la temporada siempre es diferente.
Más allá de la abundancia de cebollas amarillas, el mercado de la cebolla roja también es bueno. "El mercado de la cebolla roja está cada vez más controlado. La mayoría de los envasadores independientes no están activos en ese mercado, lo que facilita en cierto modo que esos actores actúen al unísono". Las cebollas rosas también se han vendido bien esta temporada. "Habíamos vendido la mayor parte a mediados de enero. Hubo una buena demanda de los países africanos, así como del Reino Unido. Afortunadamente, las cebollas eran bastante caras en la India, así que las rosas, cuyo precio se situaba entre las amarillas y las rojas, tuvieron mucho éxito", concluye Rinus.
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Rinus Wisse
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