Tras una caída en la producción de cebolla debido a condiciones meteorológicas adversas, Paraná ha logrado una recuperación en la cosecha 2024/25, alcanzando 127.600 toneladas, un aumento del 44% respecto al ciclo anterior. Este crecimiento se atribuye al uso de tecnología en los cultivos de la región de Guarapuava, en el Centro-Sur.
Las relaciones comerciales de Brasil y Paraná con países del Mercosur en el ámbito de la cebolla son analizadas en el Boletín de Coyuntura Agropecuaria del 14 al 20 de marzo, elaborado por el Departamento de Economía Rural (Deral) de la Secretaría de Estado de Agricultura y Abastecimiento (Seab).
En 2024, Paraná cosechó 88.600 toneladas de cebolla, un 21,1% menos que el año anterior. Sin embargo, la actual cosecha alcanzó 127.600 toneladas, con una productividad de 38.900 kilos por hectárea, la mejor en 10 años. La mayor producción se registró en 2016 con 130.800 toneladas.
Paulo Andrade señaló: "El año pasado estuvo muy influenciado en todo Brasil por las condiciones meteorológicas, pero lo que estamos viendo ahora es que la región de Guarapuava se está volviendo más avanzada tecnológicamente muy rápidamente, produciendo 50 toneladas por hectárea, mientras que otras producen 20 toneladas".
Se espera una expansión en el área sembrada con cebolla en el Estado. En años recientes, la superficie se redujo de 5.859 hectáreas en 2016 a 2.701 hectáreas en 2023/24, aumentando a 3.277 hectáreas en el último ciclo.
Debido a la baja producción, Brasil importó 257.400 toneladas de cebolla en 2024, gastando US$ 84,4 millones, un aumento del 92% respecto a 2023. Paraná importó 32.500 toneladas a un costo de US$ 8,6 millones, frente a las 9.800 toneladas en 2023. En 2014, Paraná importó cebollas de Argentina, Chile, Uruguay, España y Países Bajos.
Fuente: argenpapa.com.ar