Los productores suizos de hortalizas han ampliado enormemente el cultivo de espárragos en los últimos años, por lo que se ha elevado la oferta. En los últimos 20 años, la superficie de cultivo de espárragos blancos se ha cuadruplicado y la de espárragos verdes se ha triplicado. Los espárragos son cultivados por unos 180 productores locales, la mayoría de los cuales se encuentran en la Suiza Oriental, seguida de la Meseta Central y la Suiza Occidental.
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Sin embargo, aunque la producción de espárragos ha aumentado en Suiza, muchos todavía se importan. Las importaciones en 2024 ascendieron a unas 3.600 toneladas de espárragos blancos y 5.700 toneladas de espárragos verdes. El consumo de espárragos, incluidas las importaciones, asciende a alrededor de 1 kilogramo per cápita en Suiza.
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Mayor potencial de crecimiento
El cultivo del espárrago es exigente: requiere elevadas inversiones, la primera cosecha se hace esperar y solo se puede recolectar durante dos meses al año. "El espárrago se cultiva en el mismo lugar —es decir, en el mismo campo— durante unos diez años y no da frutos hasta el tercer año", explica Markus Waber, director adjunto de la Asociación Suiza de Productores de Hortalizas, VSGP. Esta inversión a largo plazo requiere paciencia y experiencia.
Y el cultivo del espárrago demanda mucho trabajo: desde apilar los característicos caballones y cubrirlos con film hasta la cosecha diaria. Incluso después de la cosecha, hay que cuidar el campo para mantener las plantas sanas. "Antes de que una explotación decida empezar a cultivar espárragos, tiene que plantearse las siguientes preguntas: ¿me interesa el cultivo? ¿Tengo el canal de ventas? ¿Tengo la infraestructura operativa, los campos adecuados y el personal?", dice Waber. "El espárrago tiene mucho éxito entre los consumidores y, en contraste con las importaciones, hay muy pocos productos suizos, así que hay potencial. La producción nacional va bien y tiene mucha demanda".
Fuente: lid